Las Kellys piden en Benidorm que se prohíba la externalización de servicios esenciales

El colectivo de camareras de piso, las Kellys, se ha concentrado este lunes en Benidorm para exigir que el próximo convenio de hostelería de la Costa Blanca prevea prohibir la externalización de los servicios esenciales de los hoteles.

La conmemoración del Día Mundial del Turismo les ha servido como plataforma para recordar estas peticiones ante una negociación que se reanuda en octubre tras haber sido aplazada por la pandemia. En esta pedirán también que no se permita la sobrecarga de trabajo. Y llegan con un planteamiento claro: "Si esto no se arregla, lucha. Si nadie nos escucha, huelga".

Su demanda "por un convenio justo" ha presidido una concentración en la que la portavoz de las Kellys en la Marina Baixa, Yolanda García, ha recordado que está abierta "a todo el sector de la hostelería de toda la provincia" de Alicante. Así lo ha recogido Efe, antes de que estas trabajadoras se reuniesen para hacer públicas sus reivindicaciones.

"Creemos que tenemos mucho que decir y vamos a exigir a los sindicatos que participan en la mesa de negociación que nos escuchen y mantengan reuniones con nosotras para que nuestras reivindicaciones queden reflejadas en el convenio de una vez", ha indicado García antes de esta negociación que tendrá lugar en el Invattur de Benidorm.

Las líneas rojas

El objetivo, ha subrayado García, es lograr que el nuevo convenio no traspase "ninguna" de las "dos líneas rojas" planteadas por las Kellys. Por un lado, las camareras de piso solicitan que "se ponga coto" a la externalización de los servicios esenciales de los hoteles.

En este punto pedirán que aparezca por escrito en el documento que "todo el personal que entra a trabajar a los hoteles y que se considera esencial no se pueda externalizar, sino que deba ser contratado directamente" por el establecimiento hotelero. Una demanda que, según las Kellys, se ha materializado en otros convenios de hostelería, como los de Canarias o Baleares.

La segunda "línea roja" pasa por hacer patente en el convenio que "es obligación de las empresas" hacer los estudios ergonómicos psicosociales, "tal y como marca la Ley de Prevención de Riesgos Laborales" con respecto al departamento de pisos.

"Es muy importante para nosotras ese estudio porque es donde se calculan los ritmos de trabajo y se fija el número de habitaciones que se tiene que hacer para que el trabajo no sea lesivo", ha destacado García.

Por otra parte, el colectivo sostiene que sigue pendiente de recibir contestación de la directora general de Trabajo de la Generalitat, Elvira Ródenas, a su petición de participar en las mesas por el Diálogo Social de Turismo. "Nosotras hacemos posible que la industria turística funcione porque limpiamos las habitaciones que los hoteleros después venden a los turistas", ha concluido.