"Es un escenario". El secretario autonómico de Turismo en la Comunidad Valenciana, Francesc Colomer, pone sobre la mesa la posibilidad de dimitir de su cargo en el caso de que se aprobara la llamada tasa turística que plantea la Generalitat. El político socialista ya mostraba la semana pasada su desacuerdo con esta medida que consideraba un "error" que "espero que no se produzca".
En una entrevista en la radio À Punt, Colomer ha reiterado su deseo de que esta no salga adelante: "Tengo la esperanza de que se rebobine". El responsable de la política turística en la Comunidad ha explicado que "abrigo la esperanza de que en el proceso de tramitación de la ley, en el momento de participación social, será la hora de la verdad y qué significa ser demócrata de verdad y escuchar al sector afectado".
Después de una Semana Santa en la que, aunque ha recordado que aún no hay datos oficiales, "se comparte la percepción de que han sido unos días muy buenos en lo que respecta a la ocupación", el sector ha mostrado su preocupación por lo que supondría este nuevo cargo impositivo. La propuesta de PSOE, Compromís y Podemos ha obviado a la patronal, las asociaciones de consumidores y a los municipios turísticos.
El propio presidente Ximo Puig había declarado a inicios de la Semana Santa que "no es el momento de poner en marcha una tasa turística". A pesar de esas declaraciones, la propuesta ya estaba presentada en Les Corts. Aunque, en ese proceso de negociación al que aludía Colomer en su entrevista de este martes, se espera que se establezca una moratoria de un par de años para dejar que el sector se recupere de la crisis económica provocada por la pandemia. A partir de ahí, la previsión sería que la empezaran a aplicar aquellas ciudades que así lo deseen.