El Gobierno de España reforzará al personal encargado de controlar los pasaportes en los aeropuertos de Alicante-Elche y el de Manises durante el verano, según han confirmado fuentes del Ejecutivo a EL ESPAÑOL. El motivo es el enorme incremento de viajeros británicos que se ha producido en los últimos meses tras el fin de las restricciones, y que ha provocado largas colas en los controles de entrada.
Tal como informó este diario, la propia prensa de Reino Unido se había hecho eco de esta situación, que se deriva de la salida del país de la Unión Europea. La única excepción es Irlanda del Norte, que se ha quedado al margen del Brexit.
Los ciudadanos británicos se están encontrando con muchos problemas burocráticos que antes no tenían para tramitar la entrada a España, ya que, a ojos de la UE, "es como si viniesen de Australia", explicaron fuentes empresariales.
La diferencia, por supuesto, es el volumen. La Comunidad Valenciana, y en particular la Costa Blanca, es una de las principales puertas de entrada de turistas de Reino Unido al país, lo que está provocando largas colas en los aeropuertos. Los directores de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) han alertado al Gobierno de esta situación desde hace meses, pero ha sido la temporada alta lo que ha provocado la necesidad de una respuesta inminente de cara a los próximos meses.
El verano de la recuperación
Tal como adelantó EL ESPAÑOL, el aeropuerto de Alicante-Elche oferta un total de 12.310.350 asientos (entre llegadas y salidas) en la temporada alta que va del 27 de marzo al 30 de octubre, un 4% más que en verano del último año prepandemia.
De esta cifra, la mayor parte (10.636.284) serán plazas internacionales, con un crecimiento del 2% respecto a 2019. Los nacionales representan algo más del 10% (1.674.066), pero con una espectacular subida del 28%.
La infraestructura cerró el mes de abril con más de 1,2 millones de pasajeros, un récord desde que estalló la pandemia y el 89,5 % del tráfico registrado en el último año sin emergencia sanitaria, 2019.
Los datos de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) indican que el aeródromo alicantino fue el quinto más concurrido de España en abril, coincidiendo con el primer gran periodo vacacional (Semana Santa) sin restricciones. En cuarta posición se colocó Málaga, con 1,6 millones de pasajeros (-9,2 % respecto a hace tres años), y en sexto lugar Gran Canaria (un millón, -2,8 %).
En ese mismo periodo el aeropuerto valenciano de Manises ocupó el octavo escalón, con 716.277 pasajeros y una recuperación casi completa (95 %).
En el acumulado del año el aeropuerto de Alicante ha superado ligeramente los 3 millones de pasajeros, con un descenso del 20 % respecto a las cifras de 2019. La misma caída tiene el de Manises, con casi 2 millones de usuarios.