La "deficiente planificación" en el reparto de plazas del Imserso en los meses de temporada baja, los que supuestamente tiene que cubrir de forma equitativa el programa, ha obligado a algunos hoteles de Benidorm a cerrar sus puertas durante los meses de invierno en contra de su voluntad inicial de mantener la actividad.
Fuentes de la patronal Hosbec explicaron a EL ESPAÑOL que es "la primera vez que pasa esto", y se debe a que la actual adjudicataria, Mundiplan, no ha elaborado un calendario en el que se prime la época de menor actividad, lo que en principio casaría con el espíritu original del Imserso. "Se vende al mismo precio y con la misma disponibilidad una habitación en enero que otra en abril, por lo que no hay color".
Precisamente por este motivo los empresarios esperan "una explosión" de clientes a partir de marzo, cuando "ya no es necesario ningún refuerzo para mantener la actividad". Pero ahora "el número de plazas es mínimo", lo que ha abocado al cierre a algunos hoteles.
Eso se ha dejado notar en la ocupación de enero, que se espera que no llegue al 70 % aunque todo dependerá de las contrataciones de última hora para este fin de semana. Hosbec ya apuntó en la primera quincena que el turismo internacional había logrado ocupar las camas que habían dejado libres los españoles. A pesar de eso el dato de ocupación fue del 66,5 %, casi diez puntos por debajo del año prepandemia, 2019.
Para la segunda quincena, las mismas fuentes destacan que la ciudad ha tenido que recurrir a eventos "extraordinarios" y con un gran impacto para mantener el volumen de turistas. Se refieren al mundial de Ciclocross, que se ha celebrado en Benidorm tras 11 años fuera de España (y que agotó sus 10.000 entradas), y el Benidorm Fest, cuyas galas se celebran en la última semana de enero.
Un año problemático
Benidorm acapara aproximadamente el 20 % de las más de 800.000 camas que el Imserso vende en toda España cada año. En un principio los hoteles de la capital turística no iban a participar en el programa porque un año más el Ministerio de Derechos Sociales había decidido congelar los precios a los que se venden los paquetes: unos 23 euros de media por persona y día, en régimen de pensión completa.
La batalla de los hoteles por las tarifas del Imserso lleva ya años encima de la mesa, sin que se escuchen sus reivindicaciones. Pero el incremento de costes de suministro y la inflación generalizada ha hecho "inviable" su aplicación en muchos territorios. Los empresarios señalan que "la tarifa mínima" para no trabajar a pérdidas sería ya de 35 euros.
[Benidorm lideró en 2022 la ocupación hotelera en la Península a pesar de bajar sus cifras de negocio]
Ante esta situación la Generalitat Valenciana se ha visto obligada a salir al rescate de los hoteles, con el compromiso de abonar a los establecimientos 6 euros por persona y día para completar lo que se paga por reserva. En total se ha destinado una partida de 5 millones de euros, aunque el secretario autonómico de Turismo, el socialista Francesc Colomer, ha reclamado al Gobierno central que "revise" las condiciones actuales "porque son insostenibles".
En este sentido, la patronal Hosbec ha reclamado al Gobierno que no ejecute la prórroga que le quedaría del programa, básicamente porque en la práctica eso supondría mantener las mismas tarifas. Pero para que se adjudicase un nuevo pliego "el Ejecutivo debería de estar ya trabajando en él", y de momento no hay noticias de que eso sea así.
"Nos tememos lo peor: un nuevo escenario en el que sea imposible trabajar, y teniendo que depender de otra Administración para mantener vivo el programa", señalaron los hoteleros.