El alcalde de Alicante, Luis Barcala, ha destacado este martes, en la jornada de presentación del 'Estudio técnico sobre alojamientos turísticos en Alicante’, que gracias a este informe el Ayuntamiento "cuenta por primera vez con datos objetivos y actualizados para trabajar en la ordenación y regulación de las viviendas de uso turístico (VUT) y la erradicación de las ilegales".
Barcala ha avanzado que el Ayuntamiento creará un censo de viviendas de uso turístico (VUT), que se suma al impulso de una moratoria en la concesión de licencias durante los próximos dos años y el refuerzo las inspecciones para erradicar los pisos turísticos ilegales.
Medidas, todas ellas, propuestas en el estudio presentado en el MACA, en una jornada informativa en la que han participado también la concejala de Urbanismo, Rocío Gómez, la directora general de Planeamiento, Leticia Martín, y representantes de la consultora que ha elaborado el informe.
El foro ha contado con la presencia de representantes de asociaciones y colegios profesionales, de los grupos políticos municipales y de asociaciones vecinales.
El alcalde ha resaltado que el objetivo del Ayuntamiento "no es en ningún caso atacar al modelo turístico de la ciudad, fundamental para nuestro PIB, ni perseguir la actividad de las viviendas de uso turístico, sino garantizar que haya un orden, como el propio sector viene reclamando, una normativa clara y una seguridad jurídica tanto para el sector empresarial como para la ciudad, y asegurarnos de la erradicación de toda ilegalidad".
Así, ha incidido en que "defendemos nuestro modelo productivo, nuestro modelo turístico, la diversidad que dentro de ese modelo la ciudad de Alicante proporciona y este informe nos da las pautas de hacia dónde tenemos que ir".
Según el estudio técnico sobre VUT, Alicante, con un 2,31 % de viviendas turísticas, no tiene, en estos momentos, un problema generalizado de saturación, aunque sí que existen determinados barrios en los que la concentración es más alta y en los que se recomienda establecer límites.
En este sentido, a pesar de la presión existente en ciertas zonas de la ciudad, ningún barrio de Alicante se considera, según la Ley Estatal de Vivienda, "zona de mercado residencial tensionado".
Tampoco se observa en los últimos años un decrecimiento en el número de población residente en estos barrios con mayor presencia de VUT. Esto indica que la presencia de las VUT en estas zonas "todavía no ha generado un éxodo de población ni un aumento considerable en los precios de las viviendas", según el informe.
El estudio ofrece también datos relevantes sobre el número de plazas de VUT por cada 100 habitantes, que en Alicante es de 5,5, muy por debajo de ciudades como Barcelona (11 plazas por cada 100 habitantes), Madrid (22), Málaga (30), San Sebastián (9), Sevilla (27), o Valencia (14).
Es significativo, por otro lado, el peso de las VUT en el conjunto de alojamientos turísticos de Alicante. Según el estudio, suponen un 68,42 % del total de plazas de alojamiento disponibles.
Control, límites y censo
Respecto a las recomendaciones que plantea el estudio, destaca, en primer lugar, un mayor control de las viviendas turísticas irregulares, mediante la imposición de multas y la revocación de licencias en caso de infracciones graves.
En este sentido, el alcalde ha resaltado que el Ayuntamiento de Alicante ya ha puesto el foco en la erradicación de los pisos turísticos ilegales, con medidas como el refuerzo de las inspecciones, que han permitido abrir en los últimos meses más de un centenar de decretos de suspensión de actividad, así como con la petición de asunción de competencias en materia sancionadora.
Además, el informe hace hincapié en la necesidad de establecer una moratoria en la concesión de licencias a apartamentos turísticos, que permita al Ayuntamiento integrar en el plan municipal un límite en la densidad de viviendas de uso turístico por zonas y regular el impacto que esta situación genera sobre el mercado inmobiliario y la convivencia vecinal, sobre todo en los barrios de mayor concentración. Una moratoria que el equipo de Gobierno llevará a Pleno este mismo mes.
La creación de un censo público de VUT, que mejore la transparencia en la gestión y el control de las actividades turísticas es la tercera gran conclusión del estudio elaborado por EOSA.
El Ayuntamiento ya está trabajando en el desarrollo de este censo, que permitirá a las autoridades municipales y a la ciudadanía acceder de manera transparente a la información sobre las VUT que operan legalmente en la ciudad.
Esta herramienta no solo facilitará la monitorización del cumplimiento normativo, sino que también proporcionará a los residentes la oportunidad de conocer qué viviendas en sus barrios están siendo explotadas turísticamente, promoviendo así una mayor convivencia vecinal y ayudando a prevenir conflictos derivados del uso intensivo de las viviendas como alojamientos turísticos. También será una herramienta para detectar los apartamentos turísticos ilegales y erradicarlos.