El pleno del Ayuntamiento de Elche ha aprobado este lunes el reglamento de ceremonias civiles por el que los progenitores podrán celebrar en las salas consistoriales bautizos de corte aconfesional y laico.
La medida ha salido adelante con los votos del bipartito de PSOE y Compromís y con la abstención del resto de fuerzas: Partido Popular, Ciudadanos, Vox y el concejal no adscrito Eduardo García-Ontiveros.
Asegura el portavoz de la Junta de Gobierno, el socialista Ramón Abad, que estudiaron la implantación de este servicio cuando les llegaron varias consultas de la ciudadanía reclamando su puesta en marcha en Elche.
De esta forma, Elche se suma a la lista de ciudades grandes y pequeñas de España, unas 70 en la actualidad, que opta por potenciar este tipo de actos que Abad ha calificado de "simbólicos", con el objetivo de "dar la bienvenida a los recién nacidos en Elche".
Este tipo de ceremonias nacieron en la Francia republicana (finales del XVIII, principios del XIX) y han proliferado en España en las dos últimas décadas. El primer ayuntamiento que dio el paso fue Igualada (Barcelona), en 2003. Posteriormente le siguieron municipios como Fuenlabrada, Madrid (en 2009) o Vigo donde, en 2018, tuvieron lugar 49 ceremonias de este estilo, "una por semana", ha destacado el segundo teniente de alcalde ilicitano.
Asimismo, Abad ha avanzo que el fin último de la medida es "colaborar" desde el consistorio de Elche "en la organización de celebraciones laicas tal y como mandata nuestra constitución de un estado aconfesional". "Se trata de una vía adecuada para la formación de una ciudadanía activa, lo cual permite que se potencie la conciencia de pertenencia al municipio", ha añadido.
¿Cómo funcionan?
Los bautizos o acogimientos civiles están pensados para padres de niños o niñas de hasta 6 años, según la mayoría de las ordenanzas del país. Los progenitores, eso sí, deben estar empadronados en el consistorio para solicitar este servicio.
La ceremonia, oficiada por un regidor del Ayuntamiento, consiste en la lectura de los artículos 6, 12 y 27 de la Declaración de los Derechos del Niño, aprobada por la Naciones Unidas y de otros artículos de la Constitución Española.
Y como en otros actos similares, ya sea religiosos o civiles, también está permitido que familiares o incluso padrinos puedan dar un discurso de bienvenida al menor de la casa. Al finalizar, se le otorgará a la familia una 'carta de Ciudadanía', dirigida no solo al menor, sino sobre todo a los padres y padrinos para que se comprometan, de esta forma, a proteger los derechos del niño o niña.
Reticencias de Vox
La portavoz de Vox en Elche, Aurora Rodil, ha reconocido que a su grupo "le parece muy bien" que se dé la bienvenida a los niños "en época de baja natalidad", pero que, por un lado, no ve con buenos ojos que se imponga una tasa para su celebración.
Por otro, ha añadido, tampoco considera adecuado que "se discrimine sin son civiles o religiosas". "Es que un niño católico que es bautizado no puede ser recibido por su ayuntamiento? Se ha cuestionado. Abad le ha respondido que la tasa, "que es un precio asumible", la tienen que cobrar cuando ofrecen un servicio porque así lo dicta la Ley de Hacienda.