La Policía Local de Elche detuvo el pasado 17 de diciembre a un hombre por robar dos ordenadores portátiles que se encontraban dentro de un vehículo. Los agentes acudieron, alrededor de las 20.45 horas, a la calle céntrica de Doctor Caro donde dos personas denunciaron el robo de sus dispositivos además de otros accesorios que estaban en el maletero.
La dotación policial, tras comprobar la fractura de la ventanilla del vehículo, inició el seguimiento del aparato desde el móvil mediante el servicio de localización de la marca lo cual permitió ubicar la última posición en movimiento por Camino de los Magros, en el barrio de Carrús, comunicando al resto de patrullas el hecho e iniciando una batida por la zona.
Los agentes, en colaboración con el propietario de los ordenadores, consiguieron acotar la situación de los ordenadores y detectaron a dos personas con una bolsa de transporte que coincidía con la que contenía el material sustraído del vehículo.
Tras percatarse de la presencia policial, los dos presuntos implicados se separaron y la Policía Local interceptó al que llevaba la bolsa que coincidía, además, con la descripción dada. En su interior se encontró tanto el portátil de empresa del afectado como el otro ordenador, valorado en 1.200 euros, junto con el resto de los accesorios. El hombre manifestó que el equipo informático se lo había vendido su acompañante por 100 euros, facilitando los datos de identificación básicos sobre el mismo. El implicado, de 34 años, fue inmediatamente detenido y trasladado a dependencias policiales.
Acoso sexual en redes sociales
La Guardia Civil de la Región de Murcia ha desarrollado una investigación para esclarecer un caso de ciberacoso sexual en Cartagena, que se ha saldado con la identificación, localización e investigación de su presunto autor en Alicante, al que se le ha instruido diligencias como presunto autor de delito de coacciones.
Las actuaciones se iniciaron el pasado mes de noviembre, cuando agentes detectaron que una joven de la ciudad portuaria estaba sufriendo un supuesto caso de acoso de índole sexual, la cual llegó a temer por su seguridad e integridad física. La Benemérita abrió la correspondiente investigación con la finalidad de verificar los hechos y, en su caso, esclarecerlos, lo que permitió comprobar que había una persona tras la presunta autoría de los hechos denunciados, la cual se escondía tras un alias que le liberaba de todo prejuicio y este anonimato le otorgaba total impunidad para llevar a cabo la actividad delictiva, lo que además dificultaba la labor investigadora.
Fruto de la investigación, los guardias civiles identificaron a la persona que se ocultaba tras el alias, se trataba de un varón, de 30 años, que presuntamente utilizaba redes sociales y aplicaciones de mensajería para enviar imágenes y mensajes de índole sexual, como fotografías de sus órganos genitales, al parecer con la intención de mantener relaciones sexuales.
Inicialmente, la víctima había interactuado con el presunto ciberacosador a través de redes sociales y aunque las primeras conversaciones transcurrieron con aparente normalidad, una vez realizada la toma de contacto, el varón comenzó a enviarle fotografías de alto contenido sexual.
En ese instante la joven expresó su más radical rechazo y a raíz de esto se inició un vertido de insultos, humillaciones y trato degradante que originó en la víctima un estado de sentimiento de acoso, hasta el punto de temer por su seguridad, lo que motivo la presentación de denuncia.
Una vez obtenidos todos los indicios necesarios, la Guardia Civil estableció un dispositivo de búsqueda sobre el sospechoso, que ha culminado en Alicante con su localización e investigación, al que se le ha instruido diligencias como presunto autor de delito de coacciones, por ciberacoso sexual.