Alicante

Agentes de la Policía Local de Elche han detenido a una pareja por agredirse mutuamente mientras circulaban por la carretera de Crevillente tras una discusión, que comenzó porque el hombre le había comprado un ramo de flores a otra mujer. Según manifestó un testigo, la mujer había propinado varios manotazos en el rostro y cuello de su pareja, a lo que él respondió cogiéndola de los pelos.

El testigo siguió al vehículo e indicó a la patrulla la dirección que tomaba el vehículo en cada momento, e incluso llegó a observar cómo la mujer, que estaba muy alterada, cogía en varias ocasiones el volante y estuvo a punto de producir un accidente.

Finalmente, cuando el vehículo se incorporó a la A-7, los agentes le dieron alcance y pidieron al conductor a que saliese de la autopista para no provocar ningún accidente. Tras parar en un área de servicio, el varón manifestó que su novia se había puesta celosa y le había propinado varios puñetazos en rostro y cuello, mientras que él había tratado de apartarla.

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Por su parte, la mujer indicó que había discutido con su pareja ya que se había puesto celosa al enterarse que había comprado un ramo de flores a otra mujer. Ella le había golpeado y él había respondido agrediéndola. La pareja fue detenida y trasladada a dependencias policiales.

Otros sucesos Elche

Por otro lado, el pasado 9 de marzo la Policía Local llevó a cabo la inspección de un evento de grandes características y afluencia pública organizado en una finca donde no se cumplía con las medidas de seguridad.

Tras acceder al lugar, los agentes observaron a una persona que se encontraba en la puerta haciendo de servicio de admisión sin disponer de la habilitación necesaria para ello. El recinto, de 36.000 metros, no estaba protegido por servicios de seguridad y solo existía una vía de acceso y salida de personas con una anchura reducida por la instalación de mesas, algo que impedía una posible evacuación en caso de emergencia.

En el interior, existían diferentes zonas, cabinas de pinchadiscos con música a un volumen muy elevado, así como diferentes puestos de ventas de comida, bebida y diferentes artículos y servicios sin presentar ninguno de ellos autorización para poder ejercer la actividad.

Además, los agentes observaron que el suministro eléctrico de todos los puntos de venta y del resto de instalaciones del recinto, se encontraban alimentados por instalaciones eléctricas cuyos cableados quedaban expuestos, tanto por el suelo como por los árboles, sin disponer de ningún tipo de protección, incluso en la zona destinada al público. Además, en el lugar tampoco se disponía de ningún medio de extinción de incendios.

Durante la comprobación en el interior de la vivienda, reconvertida en discoteca, los agentes localizaron una zona habilitada como cabina de DJ que no reunía las condiciones ni medidas de seguridad exigidas.

Respecto a las irregularidades detectadas, los policías levantaron siete actas de denuncia, ya que, además, la actividad carecía de los seguros de incendios, responsabilidad civil de la actividad extraordinaria, de utilización de medios sonoros o de licencia de celebración de actividad.