Todos los años se repite la misma historia. El mes de septiembre llega y con él, otro nuevo curso escolar. En ese momento, decenas de madres y padres de estudiantes de varios municipios de la Marina Alta tienen que decidir cómo irán sus hijos hasta el instituto. Denia, Vergel, Ondara, Pego o Pedreguer, son algunas de las localidades alicantinas afectados por la falta de transporte hasta Gandía.
El problema está en que no hay ningún autobús, tren u otro transporte similar que los lleve a tiempo hasta los centros educativos de la comarca valenciana de la Safor. Por este motivo, Sonia Domenech y Rosi Costa, madres de dos alumnos que cursan grados de formación profesional en la Safor, crearon hace unas semanas un grupo de Facebook para reunir a otras personas en su misma situación.
'Transport per a estudiants de Denia a Gandía' se creó con la intención de reunir a otros padres y madres en la misma situación para poder hacer frente a la contratación de un autobús privado que permitiese a sus hijos estudiar. Pero con el paso de los días y el inicio de un nuevo curso, se han ido uniendo más personas hasta llegar a un total de 69 miembros en Facebook. Ahora creen que un autobús de ALSA con dirección Gandía antes de las 8 horas de la mañana sería la mejor solución para que sus hijos pudieran llegar a tiempo a clase.
Ya lo han intentado
Las madres de estos alumnos llevan todo el verano buscando soluciones viables para que sus hijos puedan estudiar. Al principio pensaron que contratar un autobús privado sería una buena opción. El problema es que como los estudiantes van a centros educativos diferentes, el viaje de vuelta se hace demasiado largo. "Algunos chicos salían a las 15 h de clase y hasta las 17 h no llegaban a casa, por lo que muchos padres se fueron borrando", cuenta Domenech, quien también explica que al final costear este autobús todos los meses se hacía demasiado caro.
Por eso, ahora están tratando de volver a reunir a gente suficiente para contratar otro autobús, pero que los dejara a todos en Gandía. "Mi hija tendría que andar 15 minutos hasta su instituto, pero no me importa si esta es la única forma para que la puedan dejar en la ciudad", cuenta.
Domenech explica que solo necesitan un vehículo de ida porque a la vuelta no hay problemas de transporte. Cada estudiante podría coger el autobús que mejor le viniera, teniendo en cuenta que no todos los chicos salen a la misma hora de clase.
"Estuvimos mirando y un minibús nos costaba 100 euros por persona al mes; eso solo la ida; mientra que un autobús con 55 plazas ida y vuelta nos salía a 75€", explica.
Ahora la única forma que tienen de que sus hijos puedan estudiar en la comarca de la Safor es que los lleven ellas mismas a clase. Cada semana le toca a un padre o una madre llevar a tres o cuatro chicos hasta el instituto, pero no todos tiene disponibilidad para hacerlo. "Una de las chicas está yendo en moto desde Pego a Dénia. Su madre está preocupada porque esta semana han dado lluvias, y no sabe si podrá ir", cuenta la vecina de Vergel.
Otra solución: ALSA
Desde 'Transport per a estudiants de Denia a Gandia' creen que la solución más rápida y económica podría estar en ALSA, compañía de autobuses que ya hace ese recorrido por los pueblos de la Marina Alta hasta Gandía, pero cuyos horarios son incompatibles con los de los estudiantes.
Domenech habla de dos posibles soluciones, o que ALSA adelante el primero de sus autobuses para que llegue a las 7:30 a Gandía, o que la compañía refuerce su línea con un nuevo autocar. "No pedimos nada gratis. Pedimos un ALSA que se comprometa a llevar a nuestros hijos", explica. La portavoz de este grupo de padres y madres no entiende por qué la compañía no responde a su propuesta cuando este autobús "se llenaría con al menos 40 personas todas las mañanas".
Gandía o Benidorm
Algunos ayuntamientos, como en el caso de Vergel, ya están intentando mediar con la compañía para dar una solución a estos padres y madres que solo pretenden que sus hijos puedan llegar a tiempo a estudiar.
Los institutos de la Safor ofrecen distintos cursos de FP (farmacia, administrativo, auxiliar de clínica, electrónica, entre otros), que no se encuentran en la Marina Alta. Por lo que los vecinos de estas localidades se ven obligados a elegir entre Benidorm o Gandía para poder estudiar; ciudades que están a 51 y a 38 kilómetros respectivamente de Dénia, capital de esta comarca alicantina.