El presunto asesinato de David Lledó a manos de tres marroquíes ha revolucionado el pequeño pueblo alicantino de Gata de Gorgos, donde se ha convocado una manifestación vecinal bajo el lema 'Somos vecinos, somos españoles, queremos seguridad'.
Los ánimos están muy calientes en esta localidad del norte de la provincia, donde cientos de vecinos han explotado tras el trágico suceso del pasado sábado y han decidido movilizarse.
Hace un mes que la tranquilidad ha desaparecido en el municipio por la llegada de Mohamed y sus dos amigos desde Barcelona, los principales sospechosos del crimen. "Cuando vinieron, comenzó el lío, es el pan de cada día", comentaba un vecino a EL ESPAÑOL de Alicante en la misma calle de la agresión mortal.
Con la entrada en prisión de dos de los responsables y la investigación del tercero, se supone que las peleas, las agresiones sexuales y el acoso a chicas deberían haberse acabado, pero algunos vecinos no se conforman con lo sucedido.
El martes, gateros y gateras acompañaron al féretro hasta el cementerio para despedir a David, cuyo fallecimiento ha conmovido a sus 6.000 habitantes. Sin embargo, lo que tenían que ser unos días de duelo y de luto oficial se han visto salpicados de polémica.
Comentarios racistas
El odio ha inundado las calles de Gata y ha traspasado sus fronteras, desencadenando una cascada de comentarios racistas, xenófobos e islamófobos de vecinos y personas de todas partes de España que han aprovechado la ocasión para cargar contra la comunidad musulmana.
El principal agitador ha sido el presidente de Vox, Santiago Abascal, quien con una publicación en la red social X exigía que "los salvajes deben ser deportados inmediatamente a su país de origen para que cumplan condena" y que esto es consecuencia de la "inmigración ilegal masiva".
Múltiples perfiles y asociaciones nacionalistas se han hecho eco de esta demanda y han compartido mensajes de odio contra los musulmanes. Pero lo más alarmante son los comentarios que han hecho vecinos de Gata en el perfil de Facebook del ayuntamiento.
"O hacéis justicia o la haremos nosotros. Deportación a este tipo de gentuza. Da miedo ver a todas las mujeres con pañuelos y chilabas. Deberían prohibir que colonicen como lo están haciendo. Y si aún fuesen con culturas parejas a la nuestra... ¿Pero la cultura árabe?", publicaba un perfil. "Yo no soy racista, pero no podéis consentir que vayan entrando estas culturas", apuntaba otro.
Un joven que conocía a la víctima señaló a este medio que ve bien la concentración porque "los números hablan por sí solos, ¿cuánta gente está siendo agredida o asesinada por marroquíes? Hay dos tipos, los que vienen a hacer el bien, que son gente de diez, y los que vienen a hacer el mal".
Concentración ultra
Los propios familiares de David se han desvinculado del movimiento y han confirmado que no asistirán a la protesta de este domingo por no querer mezclar el dolor con fines políticos. La novia de la víctima, María, ya señaló que "no importa la nacionalidad, importan los hechos".
Por su parte, el concejal de Seguridad, Joan Vicent Vallés, asegura que "no ha entrado ninguna petición a la Subdelegación de Gobierno para realizar la concentración, por lo que si quieren hacerla, que la hagan acorde a la legalidad".
Así, lamenta que vengan "a desvirtuar y a hacer un flaco favor al pueblo con manifestaciones xenófobas y racistas aprovechándose del trágico incidente. No lo veo normal en un momento en el que todos estamos muy dolidos".
No por ello el edil quita gravedad al asunto, ya que resalta que espera que "a los asesinos, que no tienen otro nombre, les caiga todo el peso de la ley. Eran marroquíes, no hay ningún problema en decir la nacionalidad".
Ahora temen que se instale un sentimiento de rechazo hacia los migrantes en este pueblo de La Marina Alta, donde afirma que "no hay ningún problema con la comunidad musulmana". De hecho, sostiene que fue la propia Comunidad Islámica de Gata de Gorgos quien puso en conocimiento del consistorio la peligrosidad de estos individuos.