Sequías e inundaciones centran el III Congreso Nacional del Agua de Orihuela y la Diputación
Habrá 37 ponencias y 45 comunicaciones sobre Planificación, Mitigación e infraestructuras y Evaluación socioeconómica, ambiental y jurídica.
29 septiembre, 2021 13:46Noticias relacionadas
La Fundación Mediterráneo de Orihuela acogerá los próximos días 30 de septiembre y 1 de octubre el III Congreso Nacional del Agua que impulsa la Diputación de Alicante junto al Ayuntamiento oriolano y la Universidad de Alicante, y que en esta edición se centrará en fenómenos adversos como la sequía y las inundaciones.
Más de 300 personas se han inscrito para seguir este encuentro que inaugurará mañana a las 09.00 horas la vicepresidenta segunda de la Diputación de Alicante y diputada de Ciclo Hídrico, Ana Serna, junto al alcalde, Emilio Bascuñana, y otras autoridades como el director del Instituto del Agua y las Ciencias Ambientales de la UA, Joaquín Melgarejo o la vicerrectora de Transferencia, Innovación y Divulgación Científica de la esta universidad, María Jesús Pastor.
Destacados expertos participarán en el congreso en el que se ofrecerán 37 ponencias y 45 comunicaciones, que se han dividido en diferentes bloques: Planificación, Mitigación e infraestructuras y Evaluación socioeconómica, ambiental y jurídica. Todas las intervenciones podrán ser seguidas por vía telemática a través de www.iambiente.es.
Juzgado Privativo
Hoy mismo, el grupo popular en el Congreso de los Diputados ha anunciado que está impulsando con su apoyo, a través del número uno del PP de la Provincia de Alicante al Congreso, César Sánchez, la declaración del Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela como Tribunal Consuetudinario para que sea un tribunal basado en la tradición y costumbres al igual que los están el Tribunal de Aigües de València y el Consejo de Hombres Buenos de Murcia.
El diputado alicantino, ponente del Grupo Popular de la defensa en la Comisión de Justicia previa a su debate parlamentario, ha defendido la importancia de esta Proposición de Ley Orgánica de modificación de la Ley Orgánica 6/1985, de 1 de julio del Poder Judicial, para reconocer el carácter de tribunal consuetudinario y tradicional al Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela.
“Se trata de un reconocimiento a la historia de una comarca que de manera responsable ha venido gestionando los usos del agua, como lo está haciendo en la actualidad con el agua del Tajo Segura, ofreciendo oportunidades y empleos a las generaciones presentes y futuras, y que reconoce el valor que tiene la huerta de la Vega Baja del río Segura para el paisaje cultural, social, económico y medioambiental del Mediterráneo”, ha dicho.
Sánchez ha recordado en la Comisión de Justicia celebrada este martes que solamente existen cinco espacios similares en toda Europa: el de Orihuela y Valencia en España, además de otros tres en el resto de Europa, según recoge el Informe Dobris de la Agencia Europea del Medio Ambiente.
“Este reconocimiento es de vital importancia para la provincia de Alicante, para la ciudad de Orihuela. Y para tantas generaciones de representantes y representados por este tribunal, que desde hace siglos han formado parte de la tradición y la costumbre en la gestión del agua de la Vega Baja de Orihuela”, ha defendido. “Será una realidad en el Congreso y contribuiremos a resarcir una deuda histórica y a mantener la buena gestión del agua en la comarca”, ha añadido.
El Juzgado
El Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela, tal y como lo conocemos hoy en la actualidad, fue creado en el siglo XIII por el rey Alfonso X el Sabio. Desde tiempo atrás en la Historia, junto al Tribunal de Aguas de Valencia y al Consejo de Hombres Buenos de Murcia, el Tribunal Privativo de Aguas de Orihuela ha venido gobernando los territorios del río Segura. Ejerciendo una potestad administrativa y jurisdiccional y resolviendo pleitos entre regantes, herederos y otros a los que ha concernido la cuestión del riego y sus aguas.
El Derecho consuetudinario es el basado en la tradición o costumbres, típicamente propio de las sociedades premodernas. En último término, se sustenta en las tradiciones, costumbres, valores morales y convencionalismos de la sociedad que la creó.
Tanto el Tribunal de las Aguas de Valencia como el Consejo de Hombres Buenos de Murcia fueron propuestos por el gobierno de España para ser declarados Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco y ambos consiguieron este reconocimiento en 2009.