Alicante

El temporal de viento que afecta a la Comunidad Valenciana la sitúa en alerta amarilla hasta este próximo lunes. La peor parte se la ha llevado este sábado Castellón, donde han sufrido rachas de casi 120 kilómetros por hora. En Alicante la atención está puesta en el litoral norte

La Agencia Española de Meteorología en la Comunidad Valenciana confirma que está siendo el mes de noviembre más frío desde 2008. Una situación que contrasta aún más con los datos de finales de octubre, cuando se llegaron a registrar temperaturas mínimas por encima de los 20 grados, las conocidas como noches tropicales.

El nivel de alerta amarillo no implica la activación de preemergencia explican desde la Agencia de Seguridad y Emergencias de la Generalitat Valenciana. Los riesgos que se esperan en esta situación no alcanzan umbrales importantes, pero sí pueden generar problemas en actividades o localizaciones vulnerables. Y, de ahí que se pueda obligar a adoptar medidas preventivas.

En el litoral norte de Alicante la alerta ya está activa desde este sábado por fenómenos costeros, ya que sopla viento del oeste y noroeste fuerza 7. Este domingo se extenderá al litoral de toda la provincia y a su interior.

La alerta en Castellón

Los peores datos se están registrando en la provincia de Castellón, según recoge Efe. En el interior se han alcanzado rachas de 118 kilómetros por hora tanto en Xert. En ese rango más alto se encuentran también los 108 kilómetros por hora de Rossell, los 100 en Serra d'En Garcerán y los 92 km/h en Xodos. 

La fuerza de este temporal ha provocado que el Consorcio de Bomberos de Castellón haya tenido que intervenir, hasta las 17 horas, en la retirada de tres árboles caídos en tres diferentes localidades, Villahermosa del Río, Segorbe y Orpesa. En ninguna de las tres ha habido personas afectadas, han informado desde este organismo.

La predicción

Y con el viento llega también un descenso de las temperaturas, que se mantienen con pocos cambios y con los datos más bajos al final del día. La cota de nieve que se mantenía entre 1.000 y 1.200 metros desciende hasta los 800 metros. En el interior de la provincia, desde Aemet señalan la probabilidad de precipitaciones débiles. En el resto, predominio de poco nuboso.

Este domingo se mantendrán los intervalos nubosos y el impacto en las temperaturas donde se notará es en las máximas, que descenderán. De hecho, se espera que haya heladas débiles en puntos del interior. El viento soplará del oeste y noroeste moderado con rachas muy fuertes en el norte.

Hasta el próximo lunes seguirá la alerta amarilla en distintos puntos de la Comunidad Valenciana por fenómenos costeros, vientos con rachas de hasta 80 kilómetros por hora y, en el interior norte de Castellón, nieve con un espesor de 3 centímetros en 800 o 1.000 metros de altura. 

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