La historia del turrón de Jijona, un dulce típico de la Navidad con una tradición milenaria

Miel, azúcar, clara de huevo y almendra tostada, estos son los cuatro ingredientes del turrón, uno de los dulces más típicos de la Navidad. Este alimento, de tradición milenaria, cuenta además con denominación de origen alicantina: el turrón duro de Alicante y el turrón blando de Jijona.

El Consejo Regulador de las Indicaciones Geográficas Protegidas Jijona y Turrón de Alicante ya informó de la existencia de evidencias que demuestran que el turrón ya existía en la villa de Jijona en el siglo XVI.

Lo cierto es que para conocer la historia de este dulce hay que remontarse la época en la que los árabes ocupaban la Península Ibérica. Aunque hay diversas teorías sobre su origen, la que tiene más fuerza es la que habla de un supuesto concurso entre los habitantes del Al-Ándalus para encontrar un alimento rico y nutritivo que aguantase en buen estado largos periodos de tiempo, y que además fuera sencillo de transportar.

La otra versión habla de un artesano catalán. Este, apellidado Turró, unió varios ingredientes de la zona en busca de un alimento apetitoso y saciente con el que poder alimentar a la población en épocas de hambruna y guerras. Sin embargo, el excronista oficial de Jijona, Fernando Galiana afirmó que la palabra provenía de 'torrat', una masa consistente fruto de la mezcla de la miel y las almendras. Un detalle a destacar es que la receta original no incluía azúcar (solo miel), sino que este ingrediente se incorporó a principios del siglo XX.

Leyenda del turrón

El turrón de Jijona tiene hasta una leyenda, que habla de la historia de un rey que se casó con una princesa escandinava. La joven dejó su país y se trasladó al reino de aquel poderoso, pero echaba de menos su país y su gente, y la tristeza se apoderaba de ella. Con la intención de que el paisaje se pareciera a la tierra de la princesa, el rey plantó cientos de almendros. Cuando el fruto empezó a crecer, se empezó a recoger y a utilizar como alimento. Después, el rey enseñó a los agricultores de la zona el proceso, y fue ahí cuando los jijonencos empezaron con la tradición de la almendra y el turrón. 

La Revolución Industrial también cambió la producción del turrón, y el uso de nuevas maquinarias propició la fabricación de grandes cantidades de turrón y su exportación a otras partes del mundo. El 'boixet' es una de las máquinas más conocidas por los turroneros para la elaboración de la variedad blanda de este dulce. Y también debe su invención a la ciudad más dulce del mundo, Jijona. 

A la izquierda el turrón de Jijona, y a la derecha el de Alicante.

Turrón de Jijona y Alicante

En la actualidad hay gran variedad de turrones: chocolate, café, coco, yema, trufa, de guirlache (caramelo), casi tantos sabores como ingredientes. Pero lo cierto es que originales solo hay dos: el turrón blando de Jijona y la versión dura de Alicante, cuya principal diferencia es precisamente la textura. La ciudad de Jijona celebra en estos días de diciembre la feria de la Navidad, un evento en el que, por supuesto, no falta el turrón. 

Desde 1977, la marca colectiva Jijona aparece registrada ante la oficina española de patentes y marcas. El Consejo Regulador de las Indicaciones Geográficas Protegidas Jijona y Turrón de Alicante es el principal defensor de esta industria jijonenca. La principal misión de este organismo es "garantizar que todos los productos amparados por esta Denominación de Origen cumplan con todos y cada uno de los requisitos necesarios para pertenecer a la IGP (Indicación Geográfica Protegida)".