Un joven de 31 años ha sido detenido en Elche por presuntamente haber simulado ser víctima de un secuestro y de un robo con violencia. El objetivo de inventarse esta historia era tratar de ocultar ante su pareja las deudas que había contraído a causa de las apuestas.
La Policía Nacional recibió el aviso por parte del ahora arrestado en una llamada en la que aseguraba que había sido víctima de un secuestro. En ese primer contacto, que recoge Efe, contaba que le habían robado una importante cantidad de dinero y dos móviles, el suyo y el de su pareja.
El acusado mantuvo esa versión mientras la dotación de la Comisaría de Elche le asistió inicialmente. Ahí amplió los detalles de su presunta invención contando que el ataque se había producido de madrugada, cuando una persona se le había acercado y le había colocado un objeto punzante en el cuello. Bajo esa amenaza le sustrajo el dinero que llevaba y los dos móviles.
En este relato, las amenazas no se habían detenido con la entrega del efectivo y los teléfonos. Según eso, le obligó a coger su coche para recorrer diferentes sucursales en las que sacaba el dinero del cajero, hasta un total de mil euros.
La confesión
Los agentes que se habían desplazado para atenderle abrieron el protocolo de asistencia e investigación de los delitos violentos. A partir de ahí, otros componentes de la Policía Científica inspeccionaron el interior del vehículo en busca de las pruebas necesarias para detener a ese agresor.
El giro en este suceso llegó en las dependencias policiales, cuando el denunciante tenía que ratificar la denuncia. Una vez allí, se derrumbó. De ahí que reconociera que lo que les había contado era una invención.
En esta nueva versión, el detenido presuntamente reconocía que sus problemas habían empezado con una deuda que había contraído. Para saldarla entregó los mil euros que, efectivamente, faltaban en su cuenta además de los dos móviles.
Simular un delito
El siguiente paso fue el que causó la detención. Pensó que la mejor solución para encubrir estas pérdidas era fingir que había sido una víctima de un delito. Y ahí, resalta el comunicado de la Policía Nacional, fue donde supuestamente se convirtió en un infractor de la ley al simular un delito.
Esta nunca debería de ser la vía para evitar los problemas. La simulación de un delito es una infracción que aparece en el Código Penal, con su correspondiente castigo. Por incurrir en ella se detiene a la persona, lo que genera antecedentes policiales e incluso penales. Eso se puede traducir en numerosos problemas posteriores, recuerdan estas fuentes, ya que puede obstaculizar luego el acceso a ciertas ofertas de empleo público y otras complicaciones.