Elche

Elche ha recuperado, tras una década, su prueba deportiva de mountain bike por la naturaleza. Y lo ha hecho con polémica. Tras autorizarse por parte de la Conselleria de Medio Ambiente que discurriera por la sierra del municipio, tuvo lugar este pasado domingo.

Ahora, tras la denuncia del colectivo ecologista Margalló, el consistorio reconoce que presionó a la organización para que variara el recorrido ante su posible afectación de las zonas forestales sensibles. Pero el Consell lo había aprobado y los responsables del evento optaron por continuar como estaba. 

Con éxito de participación, sobre unos 500 ciclistas, y enorme expectación, en la mañana de este domingo tuvo lugar la salida de la 'Primera Marcha MTB' organizada por Demolision Bikers Club. Con 33 kilómetros, la mayoría de montaña, y un desnivel positivo de 650 metros, se trataba de la primera marcha no competitiva que organizaba esta entidad, con el que este medio ha tratado de contactar por diferentes vías.

Uno de los participantes de la prueba, David Roca, muestra en primera persona cómo fue la marcha Emilio Martínez Elche

"Pretendemos que se vea todo lo bonito del paraje de la ciudad dentro de lo que Medio Ambiente nos deja circular", decía en una entrevista a Onda Cero Elche el secretario del club, Aquilino Galindo, hace dos meses. 

Pero según el colectivo Margalló Ecologistes en Acció d'Elx, "la prueba transcurrió en gran parte por terrenos forestales con especies sensibles y en zonas con alto riesgo de erosión por las que este tipo de pruebas no debieran nunca autorizarse".

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En concreto, Manuela Campello aseguraba este lunes que “la prueba ha transcurrido por tramos con elevadas pendientes, superiores incluso al 15%, con grave riesgo de aparición de fenómenos erosivos".

Se refiere así a que la zona alicantina lleva acarreada "el mayor riesgo de padecer erosión de todo el estado, cualquier actividad humana que conlleve deterioro de la capa fértil del suelo debiera reducirse al máximo, mucho más si se trata de circulación de vehículos”, dice esta miembro.

Una imagen desde lejos de la marcha. Margalló.

“Además, la zona por la que se ha autorizado la prueba alberga especies vegetales y animales protegidos y muy sensibles a las molestias que una prueba de esta índole puede originar", añade.

Esta fuente, asimismo, se lamenta de que se haya autorizado, "por si fuera poco, cuando todavía hay especies que no han acabado su período reproductor, lo que resulta inaceptable. Promocionar estos lugares con pruebas de este tipo, cuando su nivel de protección es mínimo y el control ambiental prácticamente no existe es un gravísimo error”, afirma.  

Por último, desde Margalló afirman no entender cómo ha podido autorizarse una prueba como ésta "sin haberse aprobado aún el catálogo de senderos del término municipal". Este catálogo, que la Consellería tendría que haber elaborado cumpliendo así con lo determinado por el decreto 8/2008, de 25 de enero, del Consell, debiera entre otras cosas que regular las zonas por las que es o no posible  realizar pruebas deportivas en terrenos forestales, aseguran.

Se ha autorizado una prueba sin haber redactado todavía la cartografía de los senderos municipales, por los que, salvo prohibición expresa, podrían circular vehículos sin motor. La prueba ha transcurrido por zonas en las que nunca hasta ayer se había autorizado una prueba de este tipo y por tramos abiertos hace pocos años, como puede comprobarse con imágenes fotográficas aéreas", señalan.

Otra imagen de la prueba del pasado domingo. Margalló.

"Y además, se ha autorizado la participación en esta prueba de bicicletas con motor eléctrico, cuya capacidad erosiva del suelo es mucho mayor por su superior peso y el mayor ancho de sus ruedas. Consideramos que todos estos son errores muy graves que no pueden volver a repetirse “, sentencia el colectivo.

Reacciones

Preguntada a la concejala de Medio Ambiente, Esther Díez afirma que ella tuvo conocimiento de la situación "en el consejo de Medio ambiente" que se celebró en el Ayuntamiento a finales de la semana pasada. "Intentamos mediar con los responsables de la prueba pero tenían el ok" de Conselleria, reconoce la también portavoz de Compromís.

"No hemos tenido margen de maniobra", confiesa por su parte el edil de Deportes, Vicente Alberola. Este regidor del PSPV-PSOE también confiesa que "como última baza" intentaron convencer al club que organizaba la prueba para que modificara el recorrido más polémico, que afectaba "a un par de kilómetros"

"Lo que pasó es que ellos", en alusión a la organización, "nos pidieron poder celebrar la marcha, presentaron un circuito, el órgano competente que es la conselleria de Medio Ambiente se lo autorizó y nosotros no somos quién para desautorizarles", relata Alberola. 

Por su parte, Díez dice que ya ha hablado con la concejalía de Deportes "para garantizar una protección del entorno y establecer un protocolo" de cara a su departamento también tenga conocimiento "cada vez que un evento pasa por un espacio natural". Preguntada a la conselleria de Medio Ambiente, han dicho que iban a estudiar el caso.