Alicante

Un hombre ha sido condenado por la Audiencia Provincial de Alicante a pagar una multa de 1.080 euros por un delito relacionado con la protección de la fauna y la atenuante de dilaciones indebidas, después de vender a través de internet ejemplares de 'bujo calamita' o sapo corredor, una especie considerada como "amenazada".

La Sala de la Sección Tercera de la Audiencia confirma de este modo la sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal número 3 de Alicante el 27 de mayo de este año, que además de imponerle una multa inhabilita al penado para el ejercicio de cualquier profesión y oficio relacionado con la cría o comercio de animales silvestres y para el ejercicio de la caza y la pesca durante un año y ocho meses.

Los hechos ocurrieron en 2017, cuando la Policía Autonómica detectó que un individuo ofrecía en una web de anuncios ejemplares de sapo de la especie ‘bufo calamita’, también llamado sapo corredor, a un precio de 15 euros cada uno.

[Un vecino encuentra una caja de cartón en una calle de Alicante y descubre una serpiente viva dentro]

El 12 de mayo de ese año, los agentes se incautaron en el domicilio del vendedor, en Alicante, de 23 de estos anfibios que tenía en su poder con la intención de beneficiarse de su venta.

Según detalla la resolución del Juzgado de lo Penal, confirmada ahora por el Tribunal Provincial, el condenado sabía que ese tipo de animal con el que estaba comercializando se encontraba incluido en el listado de especies silvestres en régimen de protección especial y del catálogo español de especies amenazadas.

En su resolución, la Audiencia considera acertados los argumentos de la sentencia dictada en primera instancia y califica de “genéricas e inconcretas” las alegaciones del apelante en su recurso contra la sentencia.

La Sala recuerda que el ahora condenado se presentaba en los anuncios de la página web como un experto conocedor de las características y cuidados de este anfibio y ofrecía incluso asesoramiento.

Con motivo de la Navidad, agentes del Seprona de la Guardia Civil de Alicante, en colaboración con el parque de animales Terranatura, lanzaron una campaña de concienciación sobre la importancia de no tener ni regalar animales exóticos, tanto por la seguridad de sus dueños como por el bienestar del propio animal.

En la misma nota de prensa, la Benemérita informaba del hallazgo de una caja de cartón por un vecino de Alicante cerca de un contenedor. Tras sospechar de que en esa caja podía haber un animal, debido a los agujeros que portaba la misma, encontró en su interior una serpiente viva, que inmediatamente llevó hasta las autoridades para que se ocuparan correctamente de ella.