Es una de las joyas de la comarca del Baix Vinalopó. Sus 2.470 hectáreas fueron declaradas Parque Natural por el gobierno valenciano en 1994. Las Salinas de Santa Pola son singulares por varios aspectos. Su formación se debió a la producción de sal que una empresa comenzó a realizar allí a finales del siglo XIX, cuya actividad aún perdura. Se creó así un humedal artificial que ha quedado atravesado por una carretera, la N-332 que va de Alicante a Cartagena por la costa.
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Sin embargo, desde hace décadas, este importante enclave natural se ha convertido en un cementerio para la flora y fauna que allí vive ante la dejadez histórica del Consell, denuncia el colectivo ecologista la Talaiola- Ecologistas en Acción y Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA).
Si bien su portavoz, Sergio Arroyo, reconoce que no hay datos del número de animales muertos por atropello, lo cierto es que un informe del 2008 del jefe del servicio de Parques Naturales de las Conselleria de Medio Ambiente cifraba en medio millar de fallecimientos por atropello en seis meses que duró el estudio para un tramo concreto, por lo que al año podrían ser más de mil los ejemplares, sino mucho más.
Las especies más afectadas desde el punto de vista cuantitativo, en la clase de los mamíferos es la del ratón de campo. Dentro de las aves es la gallineta común y dentro de los reptiles la culebra bastarda, citaba la investigación.
Es por ello por lo que, desde hace varios años, los grupos ecologistas representados en la Junta Rectora del Parque Natural de las Salinas de Santa Pola, "han denunciado la degradación creciente causada por la carretera N-332" a su paso por este espacio natural y exigido en este órgano la adopción de medidas para paliar el vertido de residuos, el atropello de fauna salvaje "y el grave impacto paisajístico que provoca esta infraestructura".
"Es una carretera que soporta un tráfico descomunal", resume Arroyo a este medio. Sobre todo durante los meses de verano. Estos activistas se han dirigido en repetidas ocasiones a la Consellería de Transición Ecológica reclamando la redacción de un proyecto de minimización de impactos y de integración paisajística de la N-332 en las Salinas de Santa Pola, un documento cuya realización está contemplada en el Plan Rector y Uso y Gestión (PRUG) de este parque natural y en el que se da un plazo de seis meses desde su entrada en vigor.
Lo que pasa es que el PRUG está vigente desde 2010, recuerdan. Los colectivos ecologistas denuncian que la contestación de la Consellería a estas demandas fue dar "una respuesta a regañadientes, en el turno de ruegos y preguntas de la última reunión de la Junta Rectora celebrada el pasado 11 de noviembre". Y se preguntan si la degradación causada por la N-332 en este humedal "no es lo suficientemente importante como para dedicarle un punto en el orden del día" de la reunión anual de la Junta Rectora.
AHSA y la Talaiola afirman que las explicaciones dadas en esa reunión por el director del Parque Natural "se limitaron a dar cuenta de la celebración de una reunión con representantes de la Unidad de Carreteras del Estado en Alicante" en la que éstos manifestaron la carencia de fondos de esta administración para esta actuación y que con la celebración de la misma se cumplía con lo establecido en el PRUG, ya que ya se había instado a Fomento a la toma de medidas.
Los ecologistas consideran "completamente irresponsable esta actitud, con una clara dejación de las funciones de conservación del medio natural que tiene encomendada esta administración" y han vuelto a reclamar, a través de sendos escritos, que se inicien de manera inmediata los trabajos de redacción de un plan de minimización de impactos y de integración paisajística de la carretera N-332 a su paso por el Parque Natural de las Salinas de Santa Pola.
La Talaiola y AHSA afirman que tras 35 años desde que se aprobó la declaración del Parque Natural de las Salinas de Santa Pola, el estado de degradación y abandono que sufre éste "se agudiza día a día". "No es de recibo que tras 35 años no hayan hecho nada para minimizar los atropellos, como una señalización de que se está atravesando un espacio protegido o papeleras mientras que el tráfico ha aumentado durante este tiempo y los residuos también", denuncia Arroyo.
Charla para el domingo
Por último, los colectivos ecologistas han organizado el próximo domingo, día 5 de febrero, una actividad reivindicativa y divulgativa para denunciar la situación de maltrato de las Salinas de Santa Pola y exigir urgentes medidas paliativas.
Será a partir de las 10 horas desde el número 41 de la CV-865, a la altura del restaurante Els Xiprerets y la visita está enmarcada en las actividades con motivo del Día de los Humedales.