Alicante

En la Comunidad Valenciana, donde 493.026 personas tienen 75 años o más (un 9,72 % de la población) un 27 % de los mayores tiene dificultades para acceder a su vivienda desde la calle, ya sea por la falta de ascensores o porque tiene que utilizar las escaleras. Esta situación la agrava el hecho de que el 32 % de ellos vive solo.

La accesibilidad de los edificios recibe una nota del 6,1, según el informe realizado por la Fundación Mutua de Propietarios con motivo del Día Internacional de los Mayores que se celebra el 1 de octubre.

El comunicado determina que no se cumple con la normativa vigente, que exige unas condiciones mínimas. Para la vicepresidenta de la entidad, Laura López, las importantes carencias en accesibilidad suponen una "discriminación de los derechos fundamentales de las personas mayores como la libertad de residencia y circulación, el libre desarrollo de la personalidad o la igualdad".

[Ana Barceló (PSOE) propone crear una Concejalía de Mayores en Alicante]

El estudio refleja que el 87 % de los edificios de viviendas necesitan realizar actuaciones de eliminación de barreras arquitectónicas para mejorar su accesibilidad. Y añade que en el territorio valenciano el 55 % de los edificios tiene porteros automáticos no accesibles desde una silla de ruedas y 2 de cada 3 bloques presenta buzones elevados e inalcanzables.

Así, el análisis demuestra la necesidad de la modernización de las construcciones, ya que "el 11 % de los edificios de viviendas de la Comunidad Valenciana necesita un ascensor, 1 de cada 5 una rampa para salvar el escalón en el acceso al portal y el 43 % necesita un abrepuertas motorizado porque pesa demasiado".

Entre los motivos por los cuales no se mejoran las infraestructuras destacan la falta de acuerdo entre vecinos (63%) y los motivos económicos (55%) como las principales razones para no realizar trabajos que mejoren la accesibilidad, "especialmente cuando la inversión sobrepasa los 2.000 euros", aseguran desde la Fundación Mutua de Propietarios.

Ante esta negativa, el experto Héctor Simón afirma que "los propietarios pueden obligar a la comunidad de vecinos a asumir parte de las obras de accesibilidad y todas ellas están obligadas a pagar su coste, cualquier que sea su situación económica, por lo que no podrán vetar las obras por circunstancias económicas".

Así, el trabajo expone que entre las mayores preocupaciones de los valencianos están padecer una enfermedad crónica (71 %), no disponer de una pensión de jubilación (68 %), tener problemas de movilidad (65%), no disponer de recursos económicos para vivir (60 %) y la soledad (48 %).