Alicante

Si no tienes miedo a las alturas y te gustaría conocer lugares impresionantes desde el aire, deberías probar a volar en parapente. Se trata de un deporte aéreo basado en la utilización de corrientes ascendentes de aire caliente y la habilidad del piloto para controlar la dirección y la altitud mediante la manipulación de cuerdas o líneas de suspensión.

La experiencia de volar en parapente es similar en todas partes, con pequeñas diferencias en función de la dirección del viento, la altura desde se inicie el salto o el lugar de aterrizaje.

La auténtica diferencia está en el paisaje que se contemple desde lo alto. Por ello, la web número uno de España en regalos experiencias, www.aladinia.com ha pedido a sus usuarios que seleccionen los mejores lugares en España para disfrutar de esta experiencia que a nadie deja indiferente. Y la zona de Palomaret en Agost (Alicante) es uno de los lugares favoritos de los aventureros.

[Este pueblo gallego es uno de los mejores lugares de España para volar en parapente]

Los mejores 



Sopela, a 20 kilómetros de Bilbao, es uno de los lugares favoritos para practicar parapente. La brisa marina, los acantilados, el salitre y las playas salvajes que se encuentran en esta franja costera convierten estos vuelos en una experiencia difícil de olvidar. Sopelana se ha convertido por méritos propios en el corazón del parapente en Euskadi. Un escenario perfecto para la práctica de este deporte. Así lo acreditan los miles de vuelos de parapente biplaza que se realizan a lo largo de todo el año. 

La zona de Palomaret (Agost) a 12 km. de la costa, con espectaculares vistas de la provincia de Alicante es uno de los mejores sitios para la práctica del vuelo en parapente en España, tiene la peculiaridad de que son frecuentes las corrientes de aire caliente lo que permite el llamado vuelo térmico que se basa en remontarse dentro de las masas de aire ascendentes que se originan cuando el sol calienta el aire que proviene de la tierra. 

La empresa Parapente Factory propone otros vuelos desde el Faro de Santa Pola, surcando el cielo apoyados en la brisa marina. El vuelo en tandem de 20 minutos cuesta 65 euros.

La empresa Parapente Biplaza Cádiz propone distintos tipos de vuelos en zonas de Cádiz y Sevilla, con los que además de experimentar sensaciones únicas, se puede disfrutar de uno de los parajes más bellos de la Península y deleitarte con un atardecer único desde el aire. Se despega desde una montaña con una simple carrera hasta que el aire llena la vela del parapente. Las zonas de vuelos más habituales, para el vuelo libre o vuelo sin motor, se encuentran en la provincia de Cádiz: la zona de Algodonales, en Sierra de Líjar, a la entrada del parque natural de Grazalema y El bosque, que se ubica justamente a los pies de la Sierra de Grazalema.

Benasque y Castejón de Sos (Huesca). Con esta experiencia que propone SpeedRiding se despega desde Benasque o Castejón de Sos a los pies de los Pirineos y se surca el cielo durante una hora mientras se disfruta de unas vistas inigualables de estos pueblos y sus colindantes. También estará al alcance de la vista desde las alturas, el famoso Aneto, el pico más alto de los Pirineos. La naturaleza evoca en el Valle de Benasque paz, majestuosidad y cercanía. Un lugar en calma para aprender a disfrutar de momentos de soledad y tranquilidad en una sociedad caracterizada por la inmediatez, pero también momentos de actividad y disfrute al aire libre, escalando montañas, caminando por senderos infinitos o volando en parapente. Castejón de Sos sirve de acceso al Valle de Benasque y cuenta con una variada y amplia oferta turística. La localidad se ha convertido en el paraíso de los aficionados al vuelo, ya sea en la modalidad de parapente, ala delta o ultraligero. 

Los volcanes de Lanzarote desde el aire. La propuesta de Lanzafly permite una vista impresionante de los hermosos paisajes que rodean la isla de Lanzarote, sobrevolando las bocas de sus volcanes, sus terrenos de lava y el mar, descubriendo cómo se funden los terrenos negros y rojizos de la isla con el azul del Océano Atlántico y el azul del cielo. Esta experiencia se puede hacer en Tenesar, combinando en un mismo vuelo la costa de La Santa con el magma volcánico del Parque Nacional de Timanfaya. Además, esta misma empresa también organiza vuelos en otras localizaciones diferentes de Lanzarote como son Playa Quemada, Macher y Orzola y no solo en parapente, también con ala delta. 

El Congost de Mont-rebei y sus acantilados de 500 metros. En Lleida se encuentran algunos de los más bellos paisajes que se pueden apreciar desde el aire, como son el Vall d’Àger, el Congost de Mont-rebei, el Pantano de Canyelles y de Camarasa o la Plana de Lleida. El Congost de Mont-rebei es una joya de la naturaleza, con una extensión 600 hectáreas y con unas paredes verticales de más de 500 metros de altura que separan las provincias de Lleida y Huesca se trata de uno de los espacios naturales más singulares del Prepirineo. Además, es el único gran desfiladero que no tiene ningún tipo de infraestructura. 

Santa María de Oia en Pontevedra, a tan solo diez kilómetros de Vigo, es la zona por excelencia para volar en Galicia y poder disfrutar de unas vistas preciosas de la costa gallega. Experimentar una sensación única y sobrecogedora planeando sobre los acantilados y la costa con el mar de fondo y contemplar el Real Monasterio de Santa María de Oia es una experiencia increíble que ofrece Parapente Factory de la mano de Aladinia.com en un vuelo de 20 minutos por tan solo 65 euros.

La Muela es una colina con una impresionante altura de unos 250 metros, un lugar idóneo para el despegue de vuelos de Parapente en el que se sobrevuelan hermosos paisajes, se observan animales en libertad, trincheras de la Guerra Civil y unas magníficas vistas de la España rural contempladas desde las alturas igual que si fuéramos un pájaro. Para todos aquellos que un simple vuelo se les queda corto, FlySer Aventura les propone surcar el cielo a vista de halcón durante quince minutos y disfrutar con algunas piruetas mientras la adrenalina recorre el cuerpo. Esta trepidante experiencia incluye un vuelo en paratrike pilotado por un experimentado instructor y un extra de acrobacias.

Además de La Muela (en Alarilla), hay otras zonas que se sobrevuelan en los alrededores de Guadalajara: Arcones, Pedro Bernando y Cebreros, todos ellos en la zona centro. El vuelo con acrobacias y vídeo cuesta en Aladinia.com 55 euros y dura 15 minutos.