En 1925 el Hércules ya existía en la ciudad de Alicante y la fiesta de las Hogueras de San Juan tal cual la conocemos, no. En ese año nacía en un bar de la avenida Alfonso el Sabio la primera peña del club y una institución festera, Los Gorilas.
Luis Marco está viviendo con entusiasmo estos días de Hogueras en los que ya se piensa en lo que será el próximo centenario de esta agrupación. Con tres años más que la mismísima Federació, el peso de la historia asegura que lo viven con la responsabilidad de transmitir sus valores fundacionales.
El desaparecido bar Abril era el punto de encuentro de "un grupo de amigos y empresarios humanistas" que decidieron formar una peña "en apoyo a su Hércules, su ciudad y su provincia, integrándose en un formato identitario muy importante de defensa del alicantinismo".
Eso da pie a Marco para mostrar la pasión que siente por ese concepto. Un ideario en el que aúna la fiesta con la economía: "Defender a Alicante con mayúsculas, defender su crecimiento y riqueza en un contexto festivo, porque necesitamos ese asueto para disfrutar en un encuentro con nuestros visitantes de las Hogueras de San Joan".
De vuelta a la historia de la entidad, salta de 1925 a 1928, el año en que un gaditano como Jose María Py consigue impulsar "Les Fogueres de San Chuan". En ese inicio "recientes investigaciones acreditan que la primera portada, una en Alfonso el Sabio, es de Los Gorilas, pero no éramos aún barraca".
En ese concepto se agrupan las comisiones que no plantan monumento, una idea que Marco subraya porque "lo que nos hace enriquecedores a Alicante respecto a nuestra vecina València son las barracas". Eso y los llibrets, añade. Y como tercia su compañero Sergio Aguilar, "sin incluir en el clima que no es mérito nuestro y también es importante".
El paso para ampliar lo que es una peña a una barraca lo dan en 1933, lo que les convierte en la más veterana en su categoría. En la gala anual que organizan Marco citó a Lorenzo Carbonell, que era alcalde en aquel año, "y decía que el alicantinismo es más fuerte que las ideas políticas".
Una frase de la que Marco se apropia como verdad identitaria porque "el ejemplo de que el alicantinismo es más fuerte que las ideas políticas está en Los Gorilas, un ente plural donde estamos personas con distintas visiones del mundo, pero con algo común: la defensa de los intereses de Alicante, la defensa de nuestro Hércules como peña y la defensa de nuestras fiestas y de la Bellea del foc. Son tres elementos indisolubles a lo que somos".
Valores con los que quieren que se identifique al Gorila del año, un reconocimiento público con que homenajean a una figura pública. Este 2024, previo a ese mencionado centenario como peña, han decidido otorgarlo a Carlos Mazón. "Es una persona que ha acreditado durante todos sus años como representante público un prototipo de persona que representa muy bien a Los Gorilas: el alicantinismo y la defensa de las señas de identidad alicantinas por encima de siglas políticas. Y es algo que no admite discusión", razona.
El legado
En una entidad que ha sufrido una intensa renovación, alrededor del 70 % de sus socios a causa de la pandemia, Marco reitera la importancia del equipo. "Nosotros no somos barraquers, somos Gorilas, somos previos a las barracas", es su forma de contestar a los que piensan que esta asociación debería "trabajar para las fiestas de Alicante".
"Somos todos los alicantinos quienes tenemos que defender la permanencia y continuidad de Los Gorilas, porque son un hecho identitario de Alicante", asegura. "¿Cuántas instituciones de Alicante tienen hoy cien años? Eso es lo que nos tenemos que plantear. Tiene mérito mirar hacia atrás y defender una institución de casi cien años y comprobar el legado que tengo a mis espaldas es verdaderamente abrumador", concluye.