El valle escondido en el interior de Alicante perfecto para un día de desconexión y pasear por la historia

El mes de agosto nos está regalando unos días de mucho calor y mucho sol en la provincia de Alicante. Unas temperaturas que incitan a buscar lugares y organizar planes que impliquen escapar del calor o, al menos, encontrar un poco de frescura.

Hay quién se refugia en irse todo el día a la playa, o en pasar una tarde en uno de los parques acuáticos de la provincia. Pero si la masificación de gente no va contigo, también puedes decantarte por otros numerosos planes que puedes hacer en Alicante sin necesidad de cruzarte con una persona en cada metro cuadrado que pises.

En este sentido, son muchas las personas que optan por visitar algunos pueblos pequeños o por irse de aventura a la montaña, descubriendo así el maravilloso interior de la provincia de Alicante.

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Una de las zonas menos conocidas y que no suele ser muy concurrida por los turistas durante el verano es la Vall d'Alcalà. Ubicado en el corazón de la comarca de la Marina Alta en el norte de la provincia, este valle se encuentra rodeado de montañas y pueblos encantadores como Alcalá de la Jovada y Beniaia.

Además de descubrir sus entornos naturales mediante decenas de rutas de senderismo, si estás de paso por esta zona de la Marina Alta, no te puedes perder su estremecedora y apasionante historia. Una ocasión perfecta para entender un poco mejor el momento presente y la situación actual de la zona.

Un viaje por la historia

Resulta que el Valle de Alcalà también es conocido por otro nombre: la Montaña de Al-Azraq. Un nombre que está directamente ligado con la historia de la zona.

La figura de Al-Azraq, en la que se inspira el capitán moro de las Fiestas de Moros y Cristianos de Alcoi fue un guerrero rebelde, un líder árabe que se alzó contra el rey Jaume I en plena conquista cristiana del Reino de Valencia, allá por el siglo XIII.

Se sabe que Al-Azraq, sobrenombre de Muhamad Abu Abdallah Ben Hudzail, nació en Alcalá entre 1218 y 1220 y que le llamaban el Blau (el Azul) por el color de sus ojos.

Fue en la Vall d'Alcalà donde el visir tenía su residencia y desde donde gobernaba un vasto territorio entre los reinos taifas de Dénia y Murcia. La montaña de Al-Azraq se extiende por un territorio que hoy ocupan en la actualidad las comarcas centrales valencianas.

En este sentido, un paseo por la población de Alcalà de la Jovada te permitirá encontrarte con diversas esculturas de este personaje histórico, el más célebre de la zona, y a quien se le rinde homenaje permanentemente, tal y cómo lo destaca el hotel de la zona, La Font d'Alcalà.

Así, mientras pasees por las calles de la localidad, te toparás con el rostro del personaje histórico tallado en piedra en varios puntos del municipio, como la Font d'Alcalà. Precisamente desde allí, podrás llegar caminando a la zona donde el caudillo musulmán y el primogénito de Jaume I, Alfonso de Aragón, firmaron el Tratado del Pouet, junto a un precioso acueducto. Un pacto de vasallaje que no fue respetado y tras el cual Al-Azraq se levantó hasta tres veces contra el rey conquistador, hasta morir a las puertas de Alcoi en abril de 1276.

El paraíso de los senderistas

Esta zona de la provincia de Alicante es ideal para hacer rutas de senderismo, entre los varios recorridos existentes, destacan algunos entre los senderistas.

El primero de ellos es el recorrido que lleva hasta Mas de Capaimona y Malafi, partiendo desde Alcalà de la Jovada. De 19 kilómetros, es ideal para salir por la mañana y hacer una pausa en la mitad del camino para disfrutar de un pícnic en plena naturaleza.

El segundo recorrido que destaca entre los amantes del senderismo es la subida a la Penya Foradà desde Alcalà de la Jovada. Durante este recorrido de 7 kilómetros, pasarás por el despoblado pueblo morisco de l’Atzuvieta.

También puedes optar por recorrer algunos pueblos de la comarca en coche y disfrutar de un día de aventuras descubriendo los lugares más remotos de Alicante.