El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado este domingo el fin de todas las restricciones de competencia autonómica y el PP le ha recordado que “dé por liquidada la pandemia mientras la Atención Primaria está peor que antes del Covid”.
Por un lado, el líder socialista se ha referido en esos términos, recordando que que sigue vigente la prohibición de fumar en las terrazas de los locales de restauración y ocio tras la reunión de la Mesa Interdepartamental para la Prevención y Actuación ante la COVID-19. Será, si no cambian las circunstancias, la última que se celebrará, ya que todos los indicadores muestran la “estabilización” de la situación epidemiológica y permiten hablar del inicio de una “nueva etapa”.
Como ha subrayado Puig, este jueves se ha acordado levantar las limitaciones que aún afectaban a los sectores de hostelería y restauración, ocio y entretenimiento, cines, teatros o anfiteatros, actividades físicas y deportivas de carácter general, acontecimientos con alta concentración de personas y festivales de música.
En todos estos espacios y actividades, por tanto, solo se aplicará la normativa general de uso de mascarilla todavía vigente en toda España, de manera que seguirá siendo obligatoria en interiores, en los medios de transporte público y en los acontecimientos multitudinarios al aire libre cuando los asistentes se encuentren de pie o sentados a menos de metro y medio.
Asimismo, también decae la obligatoriedad de disponer de pasaporte COVID para acceder a residencias y centros sociales. Ximo Puig, ha señalado que, gracias a la “corresponsabilidad” ciudadana, “la Comunitat Valenciana está en las mejores condiciones para afrontar una nueva etapa” que “se ha de vivir con la máxima normalidad y con la máxima precaución”.
Y es que todos los indicadores valencianos muestran que se camina hacia la “normalización”, con índices bajos de ocupación hospitalaria y un alto grado de inmunización, ha señalado Puig, que se ha referido también a que ya está vacunada el 93,7 % de la población mayor de 12 años.
No obstante, ha pedido “prudencia” a la ciudadanía, y ha señalado que el uso de la mascarilla ha permitido salvar vidas, por lo que ha señalado que, aun cuando pase en su momento a dejar de ser obligatoria, será “aconsejable” seguir utilizándola en determinados espacios.
Reacción del PP
Por su parte, el portavoz de Sanidad del Grupo Popular en Les Corts, José Juan Zaplana, ha criticado que el president de la Generalitat “dé por liquidada la pandemia mientras la Atención Primaria está peor que antes del Covid”.
José Juan Zaplana ha señalado que la Atención Primaria “es la gran olvidada del tripartito valenciano. Durante la pandemia se cerraron muchos consultorios y se pasó de la atención presencial a la telefónica y en lugar de ir recobrando la normalidad nos encontramos ahora con citas a 15 días, con falta de personal, saturación de consultas y ausencia de medios”.
El diputado popular ha recordado que la Comunitat Valenciana está por debajo de la media nacional en ratio de población por facultativos. Así, mientras en la Comunitat Valenciana hay 0,58 médicos por cada 1.000 habitantes, en España la media es de 0,62, “situándonos en la posición 12ª de las 17 Comunidades Autónomas”.
“La consellera Barceló ha anunciado reiteradamente la puesta en marcha de un plan de Atención Primaria, pero la realidad es que no hay acciones claras para una recuperación inmediata y el sistema está en situación muy delicada”, ha manifestado el diputado.
José Juan Zaplana ha recordado que el PPCV propuso hace meses al Consell la creación de una Dirección General de Atención Primaria que pilotara la transformación necesaria del área. “En su lugar, nombraron a una comisionada, sin presupuesto ni capacidad de ejecutiva, una demostración más de lo que les importa la gestión. Y ahora anuncia un marco estratégico 2022-23, que no se ha trabajado con los profesionales y que nace con un amplio rechazo”, ha indicado.
El portavoz de Sanidad del GPP ha señalado que la Atención Primaria “requiere refuerzos, un plan para retener talento, ofertas laborales estables y la apertura de todos los centros de salud que siguen hoy cerrados, especialmente en poblaciones pequeñas y de interior”.
“Una sanidad fuerte comienza por un primer escalón fuerte, del que carecemos en este momento en la Comunitat Valenciana. Es imposible pretender volver a una normalidad con la situación sanitaria actual, Puig parece que la mascarilla en vez de en la boca se la ha puesto en los ojos”, ha concluido.