Dos agentes de la Policía Nacional han resultado heridos leves en Alicante tras ser mordidos, ambos en la pierna, por un perro de raza considerada potencialmente peligrosa que azuzó contra ellos el presunto cabecilla de un grupo de traficantes de drogas al resistirse a su captura, en una operación en la que se ha desmantelado un punto negro de venta de sustancias estupefacientes al menudeo y se han aprehendido más de once kilos de hachís.
Fuentes de la Comisaría Provincial han informado hoy de esta intervención, llevada a cabo en el barrio de Carolinas Altas, en la capital alicantina, donde los agentes realizaron cinco registros domicilios y se incautaron de casi 4.000 euros de dinero en efectivo y un vehículo de alta gama.
En total han sido arrestadas seis personas, tras una investigación desarrollada desde principio de marzo pasado. El supuesto líder de este entramado, cuyos integrantes se repartían las funciones, "se resistió activamente a su detención e, incluso, utilizó un perro de presa para intimidar a los agentes, que llegó a morder" a dos de ellos, que sufrieron heridas leves en las piernas, según han detallado a Efe fuentes policiales.
A su vez, la madre de este sospechoso guardaba el dinero producto de la venta de estupefacientes y, al parecer, conocía la actividad ilícita de su hijo. Entre los detenidos se encuentra también una mujer que, desde una vivienda cercana, se desplazaba en un patinete discretamente hacia el punto de distribución con una mochila con la cual accedía al edificio y posteriormente salía del mismo sin ella. Instantes después aumentaba notablemente la afluencia de presuntos compradores a ese lugar.
Las pesquisas guiaron a los policías hasta el domicilio donde esta mujer, junto con su pareja, se encargaba de custodiar la sustancia estupefaciente y transportar diariamente la cantidad necesaria para ser vendida ese día desde allí hasta el punto de distribución gestionado por el líder de la organización.
Otro de los investigados en la trama fue identificado por los agentes como el miembro del grupo que presuntamente cultivaba y proporcionaba marihuana al cabecilla de la trama para ser vendida en el punto negro ahora desmantelado.
Los seis arrestados, tres hombres y tres mujeres, de nacionalidades española y dominicana, de edades comprendidas entre los 33 y 56 años, tienen antecedentes previos. Tres de ellos han ingresado en prisión por orden judicial.