La provincia de Alicante y la zona sur de Valencia experimentaron en la madrugada de este viernes un fenómeno meteorológico "más habitual" de lo que creemos en verano, aunque hasta ahora no había sido tan intenso como es el de los reventones cálidos. De hecho, los expertos avisan de que todavía no ha pasado de largo y las autoridades se esperan para otro día lleno de incidencias.
La más grave de todas, relacionada con los reventones cálidos, ha tenido lugar en Cullera, una localidad costera entre Valencia ciudad y Gandía donde ha muerto un joven en el festival Medusa y 32 asistentes han resultado heridos, de los cuales solo tres han quedado ingresados con politraumatismos graves, aunque una cuarta persona está pendiente de valoración.
Testimonios de la tragedia no se explican cómo se pudo celebrar una edición teniendo en cuenta, como recogen usuarios en redes sociales, las fuertes rachas de viento, ya de madrugada, hacian desprender partes enteras del escenario y de otros elementos del festival.
Es por ello por lo que el Laboratorio de Climatología, situado en el Instituto Universitario de Geografía (Universidad de Alicante), ha dado una respuesta científica al fenómeno del reventón cálido, que tantas incógnitas está despertando en la población.
"Con situaciones de tormentas de base alta o en su fase de decaimiento, la precipitación cae a través de una capa de aire seco, evaporándose, haciendo así que el aire descendente se enfríe y pese más que el circundante", explican los expertos.
"Mientras este aire se enfría, se hace más denso, y como resultado desciende a la superficie a gran velocidad. A su vez, toda la precipitación dentro del aire descendente se evaporará. En este punto, el aire está completamente seco", puntualizan.
"Debido al impulso que ya ha adquirido, este aire seco descendente se calienta por compresión atmosférica, que va aumentando conforme desciende", afirman.
¿Y por qué además del calor conlleva vientos tan fuertes? Porque "cuando está corriente descendente llega a nivel del suelo, el impulso que ya llevaba se mueve en horizontal en todas las direcciones", responden.
Además, con la presencia de una masa de aire muy cálida y muy seca como la de estos días provoca que la temperatura en la superficie aumente muy rápidamente, mientras que el punto de rocío y la humedad caen en picado.
"Estos fenómenos son relativamente habituales en verano, pero el de anoche fue particularmente intenso, con rachas de viento de más de 100 km/h en algunas zonas, a lo que hay que sumar el ascenso repentino de la temperatura", aclaran estas fuentes.
Picos de 44º
Y es que el último pronóstico del tiempo para este fin de semana advierte de que amplias zonas de la Comunitat Valenciana alcanzarán máximas de entre 38 y 40 grados, con picos de 44 en las provincias de Valencia y Alicante, y no se descartan tormentas localmente fuertes acompañadas de granizo y fuertes rachas de viento.
Según la Agencia Estatal de Meteorología, este sábado hay probabilidad de chubascos y tormentas dispersas en la segunda mitad del día, preferentemente en zonas de Castellón y Valencia, sin descartar que sean localmente fuertes.
Para mañana domingo se espera una bajada de temperaturas de unos dos grados por lo que respecta a las máximas, con picos que rondarán los 40 grados en algunas localidades.
Igualmente, se podrían producir tormentas dispersas y ocasionales por la tarde en el interior, preferentemente en el interior de Castellón y de Alicante, sin descartar que afecten de forma aislada a zonas próximas del litoral.
Las temperaturas extremas registradas en las tres capitales de provincia en las últimas 24 horas han sido las siguientes:
Castelló 23,2-34,8
València 23,8-36,5
Alicante 21,6-35