El Gobierno de Aragón va a solicitar la declaración de zona afectada gravemente por una emergencia (antigua zona catastrófica) para 173 municipios que sufrieron las tormentas entre el 29 de agosto y el 9 de septiembre. Estas fuertes lluvias afectaron a localidades de las tres provincias, con daños que se valoran en cinco millones de euros.

Esto permitirá que el Gobierno central, a través de sus ministerios implicados, abra las líneas de ayudas y subvenciones correspondientes para reparar los daños en las infraestructuras públicas. Se trata de un instrumento de prevención y actuación ante los cada vez más frecuentes episodios de tormentas, nevadas, olas de calor y frío extremos, lluvias torrenciales y otros episodios que cada vez con más frecuencia afectan a la Comunidad Autónoma.

De hecho, estas lluvias obligaron al Gobierno de Aragón a activar el pasado 29 de agosto el Plan Especial de Protección Civil ante fenómenos adversos, que no se desactivó hasta diez días después.

Entre las consecuencias de estas tormentas, los daños en las carreteras e infraestructuras obligaron a cortar los pasos fronterizos de los túneles de Bielsa y el Somport. El primero fue reabierto el viernes 20 de septiembre, dos semanas después del cierre, mientras que el Somport continúa cerrado y sin perspectivas a corto plazo. En este caso, los daños se encuentran en el lado francés, en la carretera RN-124, y el Ejecutivo galo no tiene excesiva prisa en acelerar los trabajos.

En este sentido, la vicepresidenta de Aragón, Mar Vaquero, ha incidido este miércoles en la importancia de rehabilitar este paso con normalidad “cuanto antes”. Desde el Gobierno aragonés se está trabajando en un paso alternativo para que puedan circular camiones, mientras se trata de mantener reuniones con París a ambos lados del Pirineo.

“Hay total colaboración y conversaciones con el ministro de Transportes. No depende del Gobierno de Aragón. Por nuestra parte hay toda disposición de colaborar”, ha afirmado Vaquero.