El presidente de Aragón, Jorge Azcón, afronta hoy su primer examen ante el Parlamento aragonés. Lo hará un año y dos meses después de ser investido como máximo responsable del Gobierno autonómico, aunque con una situación bien distinta a la de entonces, cuando llegó al Pignatelli de la mano de Vox en un matrimonio que terminó en divorcio exprés.
Ahora, Azcón abrirá primer Debate sobre el Estado de la Comunidad de la legislatura con un Ejecutivo monocolor y en minoría, como era su deseo desde que conoció el resultado de las elecciones. Pero el barón popular sabe que necesita a los de Abascal para pactar cualquier ley, entre ellas, y la más cercana en el tiempo, los Presupuestos de 2025.
Desde aquella tarde-noche del 11 de julio en la que la Ejecutiva de Vox decidió su salida de cuatro gobiernos autonómicos, las relaciones entre Azcón y Nolasco no pasan por su mejor momento. El líder de Vox en Aragón asegura que el presidente ni le ha llamado para negociar las cuentas. El freno a la inmigración “ilegal y descontrolada” será una de las líneas rojas, por mucho que Azcón insista en que es competencia estatal.
Pero Azcón también se presentará ante el hemiciclo con un buen pan debajo del brazo, el de las últimas inversiones milmillonarias que han aterrizado en la Comunidad en un 2024 que define como “el año de la prosperidad”. La última, de hecho, hace sólo dos días, cuando el fondo americano Blackstone confirmó su centro de datos en Calatorao con una inversión de 7.500 millones de euros. Antes le precedieron los proyectos de Amazon Web Services o Microsoft, si bien también ha visto cómo uno de sus proyectos estrella siendo alcalde de Zaragoza, el de la planta de Becton Dickinson, dijo adiós cuando ya tenía su planta casi construida.
Así, la baza económica será uno de los platos fuertes del discurso de Azcón, que podrá intervenir ante el hemiciclo sin límite de tiempo. En esta comparecencia, se espera que el presidente haga un repaso de este año de gestión y avance sus próximos pasos, como una previsible nueva rebaja de impuestos o inversiones sanitarias o educativas. Precisamente, será el primer día de huelga convocada por los sindicatos STEA, CGT, CCOO y UGT por “recortes” en la educación.
Igualmente, la política nacional apunta a centrar parte del discurso del presidente aragonés, después de la reunión que mantuvo el pasado jueves con Pedro Sánchez. En esa cita le planteó la necesidad de aumentar las inversiones en infraestructuras, carreteras y red eléctrica, entre otras, además de tener en cuenta las particularidades de Aragón al abordar un nuevo modelo de financiación autonómica.
Una vez finalice el discurso de Azcón, la presidenta de las Cortes, Marta Fernández, suspenderá el debate hasta el jueves a las 9.00, cuando se reanudará con las intervenciones de la oposición. Cada grupo tendrá un turno de 30 minutos, a lo que responderá el líder del Ejecutivo por otra media hora, y seguirá una réplica de cada uno de diez minutos. El debate contará con la presencia de cerca de un centenar de profesionales de cerca de una veintena de medios de comunicación que se han acreditado para asistir a una de las citas políticas de mayor repercusión del año.