Más de 100 personas mayores fueron desalojadas de una residencia de Santa Fe, en el término municipal de Cadrete. Esta actuación, que llevaron a cabo en el centro desde Protección Civil a primera hora de la mañana, llevados a cabo en las zonas próximas al río Huerva ante la crecida del caudal y las lluvias de este miércoles.
A primera hora de la mañana, con el reloj marcando las 9.00, los familiares de los residentes fueron avisados del traspaso de los ancianos de este centro a uno en Huesca, donde permanecen todavía a salvo. "Recibí una llamada del Ayuntamiento y acudí de inmediato a buscar a mi madre para traerla conmigo a Cuarte", cuenta José María Marteles, uno de los parientes y vecino de la zona.
Asegura que el protocolo que se llevó a cabo en el centro fue "muy ordenado y rápido". Nada más llegar, "ya había preparados dos autobuses para llevar a los residentes a la otra residencia en Huesca", explica. Unos vehículos, entre los que se encontraban también los coches de los que acudieron a por sus familiares.
Traslado a Huesca
En el interior del edificio, "los trabajadores actuaron con mucha armonía. En cada puerta de las habitaciones iban colocando bolsas con los nombres de cada persona y sus pertenencias y medicinas dentro", señala Marteles. Un protocolo que únicamente se ejecutó para los residentes que fueron desplazados hasta Huesca.
En torno a las 12.00 todos los residentes ya habían sido desalojados del centro, y así lo señala del alcalde de Cadrete, José Bellido. Ha asegurado que esta actuación formaba parte del protocolo marcado por la Dirección General de Aragón, "aunque el día ha transcurrido sin sustos".
Esta medida ha revivido en muchos habitantes de la zona lo acontecido aquel histórico 6 de julio de 2023, con la trompa de agua que inundó el Tercer Cinturón de Zaragoza. Fue precisamente ese recuerdo lo que llevó a tomar medidas en las localidades próximas al río Huerva, y que mantuvo en tensión durante toda la jornada a los municipios de Santa Fe, Cadrete, Cuarte y María de Huerva.
En el caso de la residencia, "siempre que hay peligro de desbordamiento del río se da un aviso a los familiares porque el centro tiene riesgo de inundarse", cuenta Marteles. No obstante, el desalojo no se prolongará demasiado y "en unas 24 o 48 horas volverán a estar otra vez en Santafe", asegura Marteles, apoyándose en un mensaje recibido por parte del consistorio. "Estamos en continua comunicación", añade.
Control del caudal
Bellido ha asegurado que "el río se ha mantenido controlado durante todo el día" y solo hubo que lamentar pequeñas inundaciones en el centro de la localidad. Ejemplo de ello ha sido la avenida de Santa Fe, que ha estado cortada durante todo el miércoles hasta la avenida Murallas por la crecida del caudal.
"Por la noche, sobre la 1.00, se había soltado el agua en los pantanos de las Torcas y de Mezalocha para evitar los desbordamientos en las localidades próximas al río", ha explicado. De este modo, el caudal se ha quedado "a medio metro y a un metro dependiendo de la zona", ha añadido.
La jornada de este jueves, se prevé ya más calmada en cuanto al temporal que ha arrasado en varias comunidades españolas. En las zonas zaragozanas la alerta amarilla por precipitaciones se deja atrás, como un recuerdo más que se unirá a las tormentas vividas en el 2003 y en el 2023 en estos municipios. Sí se continua con especial atención en la zona de El Matarraña, Teruel.