Catarroja, el municipio en el que está desplegado el operativo del 112 Aragón, empieza a ver la luz tras la DANA. Las calles del sector asignado a los efectivos de la Comunidad están ya “prácticamente limpias”, e incluso ha abierto algún comercio.
“Es muy ilusionante”, reconoce el director de Operaciones del Puesto de Mando Avanzado de Aragón, Pablo Acebes. El personal sigue extrayendo coches del parquin del Ayuntamiento con el objetivo de trasladarlos a las campas de reciclado. En las próximas horas está previsto, además, contar con máquinas de empaquetado de vehículos para “ir liberando” este espacio, actualmente lleno de turismos.
En las calles asignadas a Aragón, la imagen dista mucho de la de hace una semana. Ya no quedan enseres ni vehículos, por lo que el objetivo principal -recuperar la normalidad- está ya “prácticamente cumplido”.
En las próximas horas, las tareas se centrarán en el subsector tres y cuatro, donde hay una zona ajardinada todavía con lodo. “Vamos a intentar limpiarla todo lo que podamos”, explica Acebes. También se siguen evaluando diferentes puntos del municipio con máquinas de alcantarillado. En concreto, se están revisando colectores y tuberías principales en coordinación con el Centro de Emergencias Municipal (Cecopal) para que no haya problemas de inundaciones con las lluvias que se prevén a partir de mañana.
Entre tanto, los efectivos siguen colaborando en la zona del polígono industrial con bañeras mixtas y cargadoras. Aunque no es un área asignada a Aragón, el objetivo es que las empresas puedan recuperar también cuanto antes la normalidad. “Se está haciendo una labor bastante importante”, reconoce el director de Operaciones.
Tantas horas sobre el terreno dan lugar a multitud de anécdotas. Esta pasada noche, cuando se han terminado de retirar prácticamente todos los enseres y restos que quedaban en la ‘zona aragonesa’, se ha vivido un susto por un escape de gas en un área cercana a un colegio. “Gracias a Dios, no había niños y lo hemos podido acometer sin problemas”, completa.
Mucho más amable ha sido el episodio vivido en el entorno de la calle del Olivar. El personal ha limpiado la calle para permitir que una de sus vecinas, embarazada, pudiera salir sin problemas para ir a dar a luz. “Hoy ingresaba y mañana tendrá al bebé. Nos lo ha agradecido eternamente, estaba súper contenta. Hace unas semanas ni siquiera se podía andar por esa calle. Ahora solo queda esperar que tenga un buen parto y que Lucas, que así se va a llamar el bebé, no vea ya este desastre”, apuntaba Acebes.