La gigafactoría de baterías de Stellantis y CATL en Figueruelas (Zaragoza) creará 3.000 empleos directos cuando esté a pleno rendimiento e incrementará en 10.000 millones de euros la facturación, duplicando prácticamente los 11.775 actuales.

Son los principales datos que recoge la Declaración de Interés General (DIGA) aprobada este lunes por el Gobierno de Aragón en Consejo de Gobierno, Con ella se inicia una tramitación exprés que el Ejecutivo de Jorge Azcón espera completar en seis meses.

"Hemos aprobado muchos proyectos este año, pero si hay uno que se adapta como un guante a esa denominación de estratégico es la fábrica", ha declarado el dirigente popular. La gigafactoría ocupará las 80 hectáreas anexas a la actual fábrica de coches y será "una pieza clave en el Aragón del futuro".

"Va a ser un revulsivo para la economía, hará infinitamente más fuerte el pilar industrial de nuestra Comunidad", ha recalcado en una comparecencia en la que ha estado acompañado por los agentes sociales, a quienes ha agradecido su trabajo: "Es un éxito que trasciende la política".

La gigafactoría será un proyecto "transformador". El sector, ha recordado el propio Azcón, atraviesa una coyuntura "altamente competitiva y complicada". Que Aragón vaya a contar con "el mejor fabricante de baterías en el mundo" hará que se convierta en una referencia no solo en España, sino en toda Europa.

Significará la consolidación de la fábrica de coches y diversificará la producción de Stellantis, exportando un nuevo producto a otras fábricas de España y del extranjero.

El proyecto se dividirá en cuatro fases. La fase cero comenzará en junio de 2025 con los movimientos de tierra, la cimentación y la instalación de estructuras prefabricadas para los edificios de celdas 1. La siguiente se centrará en el equipamiento y puesta en marcha inicial de la planta para la fabricación de celdas y módulos de baterías.

La fase 32 tendrá que ver con el incremento de la capacidad productiva mediante la instalación de dos nuevas líneas de celdas. Mientras, la fase 3 contempla la construcción de la planta de celdas 2 y el edificio de módulos, así como un aumento de la capacidad total para la fabricación de baterías, incluyendo módulos y celdas.

Finalmente, a partir de marzo de 2028 se prevé que la gigafactoría esté plenamente operativa y llegue a ese anhelado millón de baterías.

La fabricación y el montaje de baterías se iniciará en 2026 dentro de la actual planta, pero la construcción de la nueva comenzará en junio de 2025 con la previsión de acabar en marzo de 2028. De ellas se nutrirán en los segmentos de turismo, crossover y sub pequeños y medianos bajo la marca del grupo Stellantis tanto en Figueruelas como otras del país como las de Madrid o Vigo. "Va a ser un elemento absolutamente diferencial. Evitará que dependamos del suministro de otras fábricas", ha expuesto Azcón.

Los empleos que se crearán, ha dicho el líder regional, supondrán un aumento importantísimo de la actividad económica de Figueruelas y Pedrola. Serán puestos "con una menor temporalidad" que exigirán de una mayor cualificación, lo que se traducirá en una retribución superior a la media del sector.

Todo esto obliga, según el propio Azcón, a que el Gobierno no se relaje, dado que ahora empieza una carrera "en la que no se puede fallar". Con estas palabras se refería a todo lo relativo a la creación de infraestructuras, generación de talento... "Al igual que sucedió con General Motors, la nueva planta de Stellantis también significa la llegada de un tiempo nuevo", ha subrayado.

La nueva realidad aragonesa obligará a tomar decisiones tanto desde el punto de vista de la formación como el de la planificación urbanística, ya que se prevé un importante crecimiento en los municipios más cercanos. También podría haber ayudas para actualizar las industrias auxiliares, aunque eso el plan se concretará más adelante.