El Gobierno de Aragón entregará este martes su máxima distinción, la Medalla de Aragón, a los cerca de 1.500 trabajadores que ayudaron a Valencia tras la DANA bajo el paraguas del 112; personas que se quedaron noches enteras sin dormir y que duplicaron e incluso triplicaron turnos para ayudar a quienes lo perdieron todo aquel 29 de octubre.
Será un acto sobrio, pero multitudinario, en el que se espera la presencia del alcalde Algemesí, José Javier Sanchís, y de dos tenientes de alcalde de Catarroja: Beatriz Sierra y Miguel Verdeguer. Los tres intervendrán durante el homenaje, en el que también estará presente -en forma de vídeo- la alcaldesa de Catarroja, Lorena Silvent.
El escenario escogido es el Palacio de Congresos, que estará prácticamente al completo. A él se han invitado a las cerca de 1.500 personas que han rotado por el dispositivo, centrado en recuperar las calles de Catarroja y Algemesí.
El Gobierno aragonés destacará el trabajo de forestales, bomberos, policías, sanitarios, psicólogos, geógrafos, voluntarios, tractoristas... Así hasta prácticamente 40 colectivos que ayudaron al pueblo valenciano en las peores semanas de la tragedia.
De esa ayuda surgieron historias como las de Ailén, la mujer embarazada para la que los efectivos aragoneses se convirtieron en auténticos "ángeles de la guarda", o la de la propia alcaldesa de Catarroja, que despidió emocionada al operativo tras semanas de un intensísimo trabajo que permitieron recuperar la normalidad en tiempo récord.
En el acto también habrá representantes de la Unidad Militar de Emergencias (UME), policías locales de Zaragoza, Huesca y Teruel... En el exterior del Palacio habrá, además, una exposición de vehículos de todos los dispositivos implicados.
Durante el homenaje se oirán tambores de la Semana Santa y música de chicotén, y se interpretará el himno de Valencia.
Cada uno de los cerca de 1.500 voluntarios recibirá, excepcionalmente, una réplica de la medalla de Aragón en forma de pin. Se trata de la primera vez que se opta por extender esta distinción a semejante número de personas, un gesto que evidencia la trascendencia de la labor del operativo.
Los portavoces de los grupos parlamentarios serán los encargados de entregar las medallas, ya que, como recalcan desde el Ejecutivo, este es un acto de Aragón y no del Gobierno.
El homenaje será el acto central de la jornada, pero no será el único guiño de Aragón al pueblo valenciano. El Gobierno autonómico plantará un naranjo en el patio principal del Pignatelli para recordar para siempre a las víctimas.
Lo hará de forma provisional ya que, cuando terminen los trabajos de adecuación del edificio, sede del Gobierno de Aragón, el ejemplar será trasladado para que tenga orientación sur y goce de unas mejores condiciones.