El año más trágico para el Pirineo aragonés con un aumento del 15% de rescates y alrededor de 30 fallecidos

Este año 2024 ha teñido de negro el Pirineo aragonés ante el repunte masivo de los rescates de montaña. A lo largo de este año, se han contabilizado 31 fallecidos en montaña, lo que ha supuesto un incremento significativo respecto a las cifras registradas en el año anterior, con 17.

Entre el alto número de fallecimientos destaca la presencia de personas de avanzada edad entre las víctimas. El pasado julio, un hombre de 83 años de origen francés fallecía tras precipitarse por una zona rocosa en el Parque Natural Posets-Maladeta (Benasque), o el fallecimiento de un vecino de Zaragoza de 68 tras resbalar y caer de una altura de 200 metros cuando descendía el pico Aguja Cadier (Sallent de Gállego) son ejemplo de ello.

A pesar de esto, desde la Federación de Aragón de Montaña señalan que la edad "no es la clave": "Se trata más de la forma física, las capacidades físicas y técnicas para afrontar lo que haces", recalca Lucrecio Peña, vocal de seguridad de la FAM. "El accidente de la edad es llamativo, es un dato objetivo, pero lo importante es analizarlo en el entorno donde ocurre ese accidente", reflexiona. 

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El último fallecido registrado en el Pirineo aragonés ocurrió en Peña Telera (Biescas) cuando un saltador BASE de 57 años perdió la vida tras sufrir un fuerte impacto incompatible con la vida el pasado 17 de diciembre. Mientras, el primer fallecido en las montañas aragonesas en este 2024 se dio el 13 de enero cuando un joven navarro de 27 años perdió la vida cuando escalaba el pico Aspe (Aínsa). 

Aragón, a la cabeza de rescates

Desde la Federación de Aragón de Montaña se habla, aún sin haber cerrado el balance del año, que el número de rescates realizados por el Greim ha incrementado un 15%. Esta cifra supone superar la redonda cifra de 600 rescates en lo que va de año, lo que supone números alarmantes. En los últimos datos que el Gobierno de Aragón ha revelado de la comisión junto al Ministerio del Interior, Aragón se sitúa como la Comunidad que más rescates ha llevado acabo, aglutinando más de la mitad de las intervenciones, con hasta el 51%. 

Según los datos presentados, el mayor número de incidencias registradas se localizan en la actividad del senderismo, con un 47% de rescates. En menor medida, los operativos de rescate son resultado de la progresión por terreno abrupto (14%) y el rescate en barrancos, con un 10%.

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El mayor aglutinamiento de rescates se ha producido en verano cuando son más los que deciden acudir al Pirineo aragonés a pasar las vacaciones y con ello el incremento de personas realizando alguna actividad de montaña. Hubo semanas como la segunda de agosto en las que se llegó a registrar hasta 29 rescates, 18 de ellos llevados a cabo solo en fin de semana. 

"Hay que tener en cuenta que cualquier día de afluencia aquí en el Pirineo puede haber miles de personas realizando senderismo a la vez, y esto es como cuando transitan vehículos por una carretera, cuantos más vehículos pasan, más probabilidades hay de que haya un accidente, pues en la montaña más o menos pasa lo mismo", explica Bain Gutiérrez, teniente jefe del Greim de Huesca y de las cinco unidades en Aragón. 

El perfil que más se ha encontrado este año en las montañas aragonesas se trata de hombre de mediana edad, de en torno a los 50 años. Tan solo un tercio de ellos en época estival se encuentran federados, una cifra que aumenta hasta el 40% en temporada invernal al tratarse de actividades más exigentes. 

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El peligro de ir en solitario 

El adentrarse en solitario en la montaña supone un peligro para quien decida hacerlo. Se estima que un 17% de personas decide ir sola a hacer alguna actividad de montaña, lo que significa asumir una "serie de riesgos", por lo que desde FAM alertan: "Cuando vas en grupo esos riesgos no los asumes porque si te pasa algo, estás solo. Nadie te va a ayudar y nadie va a poder pedir ayuda", recalca Peña.

Por ello, buscan destacar "la importancia que tiene ir acompañado". En el caso de que sea en época estival lo ideal es que el grupo esté formado por tres personas y en invierno el número se incrementa ante la dificultad del terreno y la gravedad de los rescates. 

Aunque un dato que preocupa es el número de rescates producidos por la sobreestimación de las capacidades. Alrededor de un 68% de los casos se trata por este factor. Un incidente de estas características se dio este verano cuando un hombre de 40 años falleció solo después de que sus compañeros se fueran a hacer barranquismo.

"Todo el mundo piensa que el accidente no les va a ocurrir a ellos. Es extremadamente importante que las capacidades del grupo se midan por el nivel de capacidad del menos capaz", explica Peña. Por ello, hay que tener en cuenta todos los factores para evitar un desenlace trágico.