
Samuel Sánchez, este jueves en su ponencia en el Paraninfo
Samuel Sánchez, investigador de nanorobots en el cáncer de vejiga: "Podemos reducir el tumor al 90%"
El científico ha participado con su ponencia 'Healing Microrobots' en el congreso internacional 'Medicine 2044' este jueves en Zaragoza.
Más información: ¿Cómo será la medicina dentro de 20 años?: "Todo el mundo tendrá su médico robot en casa en un futuro"
Los avances en medicina no paran de llegar y algunos de ellos pueden llegar a suponer un antes y un después en el tratamiento de diversas enfermedades. Ejemplo de ello es la investigación llevada a cabo por Samuel Sánchez,, doctor en Química y director del grupo de investigación de nanobiodispositivos del Instituto de Bioingeniería de Cataluña (IBEC). Además, cofundador y CEO de Nanobots Therapeutics. Sánchez ha participado este jueves con su ponencia 'Healing Microrobots' en el Congreso Medicine 2044 en Zaragoza.
Su estudio sobre nanorobots en el cáncer de vejiga se ha convertido en toda una revolución en la investigación sobre esta enfermedad: "Hemos visto que con una sola administración en el cáncer de vejiga reducimos el 90% del tumor, cuando los pacientes van una docena de veces al hospital", explica el investigador.
¿Pero qué es un nanorobot? Según explica este investigador se trata de "pequeños submarinos" que son capaces de transportar fármacos y penetrar en los tumores de forma "eficiente" y poder llegar a reducirlos. Estas herramientas pueden ser "vitales" para el futuro de la medicina para evitar así el desarrollo de efectos secundarios.
Su trabajo de nanorobots en el cáncer de vejiga se ha llegado a publicar en la prestigiosa revista 'Nature Nanotechnology'. En concreto, su trabajo se centra en unas esferas biomédicas de óxido de silicio que transportan en su interior la dosis precisa del fármaco hasta el interior del tumor y así combatir el cáncer.
Las investigaciones en la actualidad se centran en su aplicación en ratones, pero este investigador mira más allá para poder suponer un antes y un después en las personas: "Planteamos que en tres o cuatro años llegar a pacientes y a partir de ahí empezar ensayos clínicos", explica.
Para que esto sea posible, Sánchez y su equipo abordan tres retos por delante. El primero de ellos, que resulta uno de los más determinantes, es la financiación. En segundo lugar, el "escalado": "Poder fabricar estos nanorobots a escala masiva para que pueda llegar a todos los pacientes", matiza.
Y por último, en el ámbito de la regulación a través del rápido trabajo de las agencias regulatorias. "Una vez superado esto es que los doctores estén preparados para cambiar los métodos actuales por los métodos más avanzados", recalca.
A pesar de que pueda parecer una práctica que suponga un encarecimiento de los tratamientos, este investigador matiza que no tiene porqué ser así. "Lo que encarece es el fármaco y si llevamos menos fármaco, necesitas menos hospitalizaciones, menos efectos secundarios y el paciente no tiene que ir tantas veces al hospital, por lo tanto, el coste será más o menos más barato que el actual", destaca. A lo que también supondría una mejora para los pacientes: "Hemos visto que podemos ser competitivos y mejorar la calidad de vida de los pacientes enormemente".
Por ello se centran más allá del cáncer de vejiga para que estos nanorobots sean eficaces en otros tipos de cáncer: "En el futuro podrían ser también una herramienta para ver cuál es elestado del tumor, cómo progresa y a la vez poder tratarlo", concluye.