Los hoteles de Zaragoza vivirán la próxima semana uno de sus momentos clave del año con las Fiestas del Pilar, aunque la coincidencia de los días grandes en fin de semana es un pequeño lastre para la ocupación. No obstante, seguirá siendo un “aliciente fundamental” para el sector, que valora la amplia programación de actividades y la coincidencia con eventos económicos o deportivos.

Así, los hoteles prevén una ocupación global del 67% para toda la semana, aunque la noche del 12 de octubre se rozará el lleno, superando ya el 93% a falta de las reservas de última hora. Igualmente, el viernes 11, víspera del día grande, también alcanza el 90% y este sábado 5 se encuentra el 85% con el pregón.

No obstante, los caprichos del calendario hacen que los días más importantes vayan a coincidir en sábado y domingo, sin más festivos laborales, lo que lastrará la ocupación el resto de los días. De hecho, las cifras globales se mantienen en línea del año pasado, y se encuentran hasta 10 puntos por debajo de las de 2019, que también cayó en fin de semana y se elevó al 77%. Además, las pernoctaciones caen de 2,4 días a 1,9.

En cualquier caso, Zaragoza se llenará estos días de turistas, sobre todo nacionales, procedentes de Madrid, Cataluña, Comunidad Valenciana o Andalucía. Mientras, uno de cada cinco visitantes vendrá desde el extranjero, principalmente de Francia, Italia, Portugal y Reino Unido. Los principales visitantes son parejas, grupos de amigos y familias.

En este sentido, para lograr atraer más turistas extranjeros, el presidente de Horeca, Antonio Presencio, pide la ayuda de todos. “Nuestra ocupación media no es la que nos gustaría. Si queremos dar el salto internacional, primero debemos consolidar lo que tenemos. Es una apuesta de destino que hay que hacer y donde debemos aportar todos. Ya dimos un salto para la Expo y se han mantenido instalaciones como el Palacio de Congresos, Auditorio y Feria”, ha subrayado.

Los visitantes que llegan estos días a Zaragoza se interesan, principalmente, por la visita al Pilar, el Palacio de La Aljafería, el Casco Histórico, las murallas romanas y todo el entorno del centro. Se marchan, afirma Presencio, con “una sensación muy buena” y de que “la gente es muy amable”.

Los pisos turísticos

Sin embargo, la proliferación de pisos turísticos por la ciudad también puede llegar a condicionar la ocupación hotelera. Desde la patronal hotelera sostienen que, aunque todavía no se alcanzan las cifras de las grandes urbes, debe iniciarse una mayor labor de control.

“Queremos que las normas sean exactamente igual para todos, en registros de viajeros e inspecciones, para competir en igualdad de condiciones. Queremos que haya una labor de inspección por las autoridades y hagan cumplir las normas exactamente igual que las cumplimos nosotros”, ha señalado Presencio.