Zaragoza
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La DANA que ha arrasado numerosos pueblos de la provincia de Valencia también se llevó por delante el parque natural sobre el que está levantado el Monasterio de Piedra. Las fuertes lluvias provocaron el desbordamiento del río Piedra, que multiplicó por 50 o 60 su caudal y destrozó todo lo que encontró a su paso, desde infraestructuras y puentes hasta los recursos turísticos que se habían instalado por el recorrido.

La riada llegó el miércoles al mediodía, alrededor de las 16.00. La CHE ya había alertado de que ríos como el Piedra, entre otros, superarían los niveles de aviso y propiciarían una crecida importante. El tranquilo riachuelo que suele transcurrir por el paisaje se convirtió en un auténtico torrente de agua como nunca antes se había visto en casi 200 años de historia del parque.

Hasta ahora, el recorrido del Parque del Monasterio de Piedra estaba cuajado de sorpresas y bellísimos rincones de cualidades estéticas y paisajistas sorprendentes. A la belleza propia del río Piedra, hay que añadir el bullicio y frescor de sus cascadas, la apacible quietud de sus lagos, y el cantar de diferentes especies de aves, de las que se han identificado más de 20 especies distintas.

El parque natural del Monasterio de Piedra fue creado por Juan Federico Muntadas a mediados del siglo XIX. El río Piedra forma, al pasar por las inmediaciones del monasterio, un paraje de gran belleza paisajística, con muchas cascadas de agua que se dividen en innumerables hilos de agua o chorreras, siendo la cascada de la Cola del Caballo, con más de 50 metros, la de mayor altura.

El parque también cuenta con varias grutas, descubiertas por el fundador del parque. Allí también se encuentra el llamado lago Espejo. Recientemente, se pueden presenciar en las inmediaciones del parque espectáculos con aves, entre las que se encuentran lechuzas, águilas, buitres, búhos y alimoches.

Ahora, todo este paisaje ha quedado devastado. De hecho, este histórico monasterio ya sufrió en septiembre los efectos de una importante crecida del río, pero, entonces, los daños pudieron arreglarse en una semana. Ahora, calculan que pueden tardar dos o tres meses, con lo que el centro ya no abriría hasta el próximo año.

El Monasterio de Piedra es uno de los principales puntos de atracción turística de la comarca Comunidad de Calatayud y atrae cada año a unos 300.000 visitantes al recinto, ubicado en el término municipal de Nuévalos.