La maquinaria regresará a la avenida Cataluña de Zaragoza esta semana. Así lo ha asegurado la alcaldesa de la ciudad, Natalia Chueca, durante su visita a los trabajos que se están acometiendo en la avenida Navarra, otra de las reformas acometidas en la capital que buscan plasmar "el urbanismo del siglo XXI".
Más árboles, bancos, espacios para el ciudadano y aceras amplias son algunos de los elementos que llegarán a la avenida Cataluña en nueve meses, lo que costará finalizar los trabajos. Todo ello con una inversión de 1,1 millones de euros que se suman a los 4,4 millones de la primera fase.
En cuanto al avance de los trabajos en la avenida Navarra, en el barrio Delicias, la alcaldesa ha asegurado que todo avanza "a un buen ritmo". En concreto, durante el primer mes se ha estado acometiendo la primera fase del proyecto en la cara norte de la avenida.
Avenida Navarra, en el barrio de Delicias de Zaragoza, en obras.
Sobre esta fase, la alcaldesa ha recordado que se incluirán más de 2.300 metros cuadrados de espacios verdes y áreas de uso vecinal, siguiendo el modelo de éxito de la primera etapa. Este tramo contará con 145 árboles, más de 1.400 plantas arbustivas y florales, además de 92 bancos, con el objetivo de convertir la avenida en un espacio más acogedor y revitalizar el comercio local.
Fase II
Las obras de esta fase se extenderán hasta finales de marzo, tras lo cual se abordará la calzada y la acera sur para incorporar nuevos equipamientos. En la acera sur, se instalará un área de ejercicio para personas mayores cerca del Paseo de Calanda, junto a la residencia de la tercera edad, con equipamiento para fomentar la movilidad.
También se habilitará una zona de juegos infantiles frente al Centro Cívico Delicias, adaptada al espacio disponible en la banda verde. En la última fase, los trabajos se centrarán en la rotonda de la calle Rioja, donde se mejorará la accesibilidad del centro de especialidades Inocencio Jiménez, se conectarán tuberías, se reconfigurará el carril bici y se ampliarán las aceras.
Entre las medidas destacadas para mejorar la seguridad vial, se elevarán los cruces con calles transversales para dar continuidad a las aceras y priorizar a los peatones, mientras que la calzada tendrá dos carriles por sentido y un carril bici segregado de doble sentido en el eje central. Estas mejoras buscan consolidar la transformación integral de la avenida, conectando esta nueva etapa con las obras previas del Paseo Calanda.