Tal y como han venido denunciando los vecinos y los comerciantes de la avenida San Juan Bosco, en Zaragoza, el Ayuntamiento de Zaragoza baraja la posibilidad de instalar cámaras de seguridad en la plaza donde se ubica la Garden, una de las discotecas más conflictivas de la ciudad. Esta petición de reforzar la seguridad en la zona, que ha puesto sobre la mesa la Junta de Distrito Universidad, pone como punto de partida esta zona por ser el punto más conflictivo del distrito.
No es el único barrio de la ciudad que ha pedido un aumento de la protección al ciudadano con motivo de esta discoteca. Como ya adelanto EL ESPAÑOL DE ARAGÓN, los "trapicheos", las peleas y el ruido constante a altas horas de la madrugada han llevado a los vecinos de Ciudad Jardín a llevar a cabo una recogida de firmas para instalar cámaras de seguridad en el entorno de la plaza Domingo Savio.
Una demanda que se ha acelerado al conocer que la discoteca Garden, el foco del conflicto, ha pedido al Ayuntamiento de Zaragoza la licencia para abrir también en horario de tardes. "Es un parque que está poco iluminado y, con todo lo que se acumula ahí, da miedo pasar", han asegurado desde la asociación de Ciudad Jardín.
Proyecto piloto en El Gancho
El Ayuntamiento de Zaragoza dio inicio en 2020 a la instalación de cámaras de seguridad en el barrio de El Gancho por solicitud de los vecinos. Un proyecto piloto que comenzó durante el mandato de Jorge Azcón con la colocación de cuatro dispositivos de videovigilancia en puntos clave: dos en la calle Ramón Pignatelli, en las esquinas con Cerezo y Zamoray, y otras dos en Agustina de Aragón, en las intersecciones con Miguel de Ara y Cerezo.
Poco a poco se han ido instalando en más calles de El Gancho, pero también han llegado a otras zonas de la ciudad. En 2023 se colocaron dos en el barrio Oliver, una en la calle Antonio Leyva y otra en el parque Copérnico, en una zona delimitada por la calle del mismo nombre y la calle Monasterio de Piedra.
Una propuesta de videovigilancia que, como las demás, fue iniciativa de las asociaciones de vecinos y contó con el apoyo unánime de todos los grupos políticos representados en la Junta de Distrito, en el marco del Plan Integral del Barrio Oliver (PIBO).
Ese mismo año, el sistema de videovigilancia por medio de cámaras de seguridad a pie de calle también fue la solución para controlar los altercados en otras zonas calientes, como en el entorno de Doctor Cerrada. Una medida en las calles Ricla, Dato, Fita, Princesa que se externalizó a una empresa externa, Orbe Telecomunicaciones S.L., por 174.643,61 euros, IVA incluido.
Refuerzos de este año
En octubre de este año, Zaragoza ya confirmó que se reforzaría la seguridad de una de sus calles más conflictivas con inteligencia artificial: la calle Delicias, que sigue acaparando titulares por violentas peleas y robos.
Como consecuencia, el Ayuntamiento anunció hace ya tiempo su intención de poner cámaras de videovigilancia, un proyecto que está ya más cerca gracias al anuncio de licitación de la compra de dos unidades para la propia calle Delicias y el Jardín Vertical. Todo este refuerzo alcanza un coste de contratación de 18.108,22 euros, IVA incluido.
La intención municipal es que en el Casco Histórico se continúe ampliando la red existente en El Gancho, y así lo anunció la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, durante el verano pasado. Además, apunto a que ya se estaba estudiando también la colocación en los alrededores de calle Alfonso y Don Jaime, así como en el Parque Bruil.
Universidad sería otro de los distritos en los que se incorporará este sistema de videovigilancia y, más en concreto, en los lugares más concurridos por el ocio nocturno que hay en este distrito de la ciudad. Del mismo modo, se instalarán en la calle María Lostal y adyacentes.