La noche de Nochebuena en Zaragoza ha transcurrido con normalidad, sin embargo, en la mañana de Navidad los bomberos han tenido que salir para apagar un pequeño incendio en una residencia de ancianos.
El fuego se ha originado en el horno de la residencia de Ozanam Santa Isabel, por causas que todavía se desconocen. El ternasco, que iba a ser la comida de Navidad de los residentes, ha prendido fuego provocando una gran cantidad de humo.
Las alarmas han sonado rápidamente y han acudido a la residencia un coche de la policía y un camión de bomberos. El suceso ha ocurrido por la mañana sobre las 12.00 del medio día. Sofocar las llamas apenas han tardado unos 8 minutos, reconocían desde el cuerpo de bomberos. También han acudido al centro personal del 061 para comprobar que no hubiera personas afectadas.
Residencia de ancianos Ozanam Santa Isabel.
El fuego ha calcinado el ternasco y estropeado el horno, pero las llamas no han ido a más. Lo aparatoso ha sido el humo: "había tanto que nos ha sido imposible apagar las alarmas", relataba a El Español una trabajadora. Las puertas cortafuegos han actuado con normalidad y el humo no se ha extendido más allá de la cocina.
En la zona afectada solo estaban dos personas trabajando: la cocinera y la pinche, que no han sufrido ningún daño. El humo no ha llegado ni a las zonas comunes ni a las habitaciones, por lo que los residentes casi "ni se han enterado" y todo ha quedado en un susto.
"La pena es el ternasco que se ha echado a perder", reconocía la trabajadora, quién ha explicado que era un menú especial por Navidad pero que se ha tenido que cambiar en el último momento. La residencia de Santa Isabel cuenta con unas 100 plazas, pero esta mañana no estaban todos los ancianos. Muchos se fueron hace un par de días porque pasan las vacaciones navideñas con la familia, y unos 15 habías salido ya a comer fuera.
El fuego ha estropeado el horno, y previsiblemente haya que cambiarlo. Hoy al ser festivo no es posible, pero mañana a primera hora llamarán al técnico para que le eche un vistazo y ver si se puede arreglar o comprar uno nuevo.