Imagen del partido. LaLiga Hypermotion
Broncas y balones, tiempo perdido y el brazalete de capitán: la otra cara del Real Zaragoza - Cádiz
El partido de este domingo ha destacado por el poco fútbol y los excesivos parones. La Romareda ha clamado contra el colegiado.
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El Real Zaragoza ha sumado un escaso punto este domingo ante el Cádiz en La Romareda. Los maños llegaban a la jornada 25 con la oportunidad de conseguir su segunda victoria consecutiva y quedarse a siete puntos de los puestos de promoción. Una ilusión que volvió tras la remontada y la imagen del equipo en Málaga.
Sin embargo, en el segundo encuentro de Ramírez en casa, el Real Zaragoza se ha quedado sin gol y sin triunfo. También hay que decir que es la primera vez que deja la portería a 0 con el nuevo técnico.
Pero este domingo han destacado más las numerosas acciones extrafutbolísticas que las propias del juego. Y es que ha sido un duelo feo, con pérdidas de tiempo y muchos parones. A la vista está que en la primera parte se han añadido cuatro minutos y en la segunda otros seis.
Han sido varias las tanganas y broncas entre jugadores a lo largo de los 90 minutos, una de ellas provocada porque el Cádiz no le ha devuelto un balón que había mandado a propósito fuera de banda el Real Zaragoza para atender a un Toni Moya tendido en el área. La típica acción de deportividad y que ha enfadado a jugadores y aficionados.
Por entrar en más detalle de las faltas y barro, el Real Zaragoza ha recibido seis cartulinas amarillas (dos a Tasende), por tres del cuadro andaluz. 19 faltas locales y 16 visitantes son otro reflejo.
Pitos de La Romareda
Además, La Romareda, con casi 20.000 espectadores, ha estado muy enchufada durante todo el encuentro. Al contrario que hace dos semanas, cuando los presentes saltaron contra el entrenador y la directiva, esta vez ha sido para clamar contra las acciones arbitrales.
González Esteban, colegiado de esta tarde, ha escuchado los pitos de la afición zaragocista, tanto en el descanso y al final, como durante el resto del encuentro. Muchas decisiones han sido cuestionadas y protestadas.
Otro de los momentos más llamativos del Real Zaragoza – Cádiz ha sido una acción con un aficionado de La Romareda, al devolver el balón al jugador rival. Este hecho ha provocado que el árbitro principal tuviera que avisar al delegado de campo para que la megafonía del campo emitiera un mensaje de que no se repitiese.
Las palabras apenas se han escuchado por el ruido y silbidos de la grada. Esta incidencia ha quedado reflejada en el acta. En ella se describe que el aficionado local tenía "clara intención de impactarle" al futbolista del Cádiz.
Por otro lado, ha sido destacado el portador del brazalete de capitán. El encargado de llevarlo hoy en el brazo ha sido Keidi Bare ante la ausencia de Lluís López, Cristian o Francho Serrano.
Lo ha sido durante buena parte del tiempo, hasta que el canterano ha saltado al césped en el minuto 63 por Toni Moya y ha sido el centrocampista quien lo ha lucido hasta el final.
Un Francho, por cierto, que ha saltado al césped con una gran ovación del público.
