Casi uno de cada tres habitantes en Aragón en el año 2039 será inmigrante, prácticamente el doble del peso que tienen en la actualidad. En total, de 1,5 millones de personas que residirá en el territorio, más de 400.000 procederán del extranjero, por los 250.000 que suponen a día de hoy. Esto significa que, en 15 años, llegarán a la Comunidad unas 150.000 personas.

Así lo recoge el informe publicado por la Cámara de Comercio, que expone la necesidad que tiene la economía aragonesa de este colectivo para mantener sus niveles de competitividad. No en vano, valoran que la inmigración ha jugado un papel “clave” en el mercado laboral y ha tenido un impacto positivo en las finanzas, con un superávit fiscal de 500 millones de euros.

De hecho, desde comienzos de siglo, el peso de la población inmigrante se ha multiplicado por 4. En el año 2002, estas personas apenas suponían el 3,8% del conjunto de Aragón, mientras que, a final de 2023, ya se situaba en el 17,4%. Además, se espera que siga creciendo, superando el 30% en 2039, según las previsiones del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Y es que, como reconoce el presidente de la Cámara de Comercio, Jorge Villarroya, la expansión de Aragón “no hubiera sido posible” sin la llegada de inmigrantes. Además, a su juicio, las proyecciones a futuro son un aviso a las instituciones de la necesidad de “anticiparse” y adaptarse a estas circunstancias. “Va a ser necesario contratar a gente de fuera. Más vale que nos vayamos acostumbrando. Hay que mentalizarse”, ha expuesto.

“Fundamental” para el empleo

En concreto, desde la Cámara definen como “fundamental” el impacto de los inmigrantes para el empleo. Actualmente, el 15,4% de la población activa ya son personas extranjeras, y la proporción de inactivos -aquellos que ni trabajan ni están inscritas en el paro- es similar a la de los españoles. “Esto pone de relieve que la inmigración viene a trabajar y contribuye a las arcas, al desarrollo y la evolución de la economía”, ha apuntado Villarroya.

Este colectivo ha sido importante para cubrir vacantes en sectores como la agricultura, el empleo doméstico, el comercio o la hostelería. “Estos trabajadores han demostrado una gran capacidad de integración en el mercado laboral, siendo especialmente significativos en sectores con alta demanda de mano de obra”, ha señalado desde la Cámara de Comercio.

Asimismo, el informe separa entre los extranjeros de doble nacionalidad, la mayoría procedentes de Latinoamérica, y los de una única, de su país de origen. Los primeros aparecen en sectores como actividades científicas, administrativas y servicios sociales en la provincia de Zaragoza. Mientras, los segundos son clave en el empleo doméstico y el sector primario y están más presentes en Huesca y en Teruel.

Para la Cámara de Comercio, estos datos muestran la “positiva” contribución de los inmigrantes al mercado laboral aragonés. El autor del informe, el economista Marcos Sanso, incluso acusa a algunas formaciones políticas de “echar leña al fuego”, “aunque sea con bulos”.

Propuestas y recomendaciones

Una vez publicados los datos en el informe, desde la Cámara han añadido una serie de propuestas a las instituciones públicas, centradas básicamente en “anticiparse” a las previsiones de fuerte crecimiento. En definitiva, plantean “hacer un territorio más atractivo”, con medidas que favorezcan la inclusión social y económica de los inmigrantes y fomentar la formación.

Igualmente, consideran que la sociedad también debe “acostumbrarse” a la llegada de inmigrantes. Por ello, apelan a todos los agentes a trabajar de manera conjunta para asegurar una “integración exitosa” que “beneficie a Aragón en su conjunto”.