La Dirección de la planta de Stellantis de Zaragoza estaría barajando cerrar una de sus dos líneas de producción y agrupar todo el ensamblaje de vehículos de forma conjunta. Una decisión que habría tomado debido a la caída del volumen de producción previsto para 2025 y 2026, años en los que aprovecharía para instalar la plataforma STLA Small, que garantiza el futuro de la factoría, según ha publicado ‘La Tribuna de la Automoción’.
Por el momento, fuentes de la planta han rehusado hacer declaraciones al respecto de una decisión que tampoco ha sido trasladada al Comité de Empresa. Tampoco desde el Gobierno de Aragón se tiene constancia oficialmente de esta situación, aunque ya se han puesto en contacto con la compañía para buscar una información más detallada. “Es una situación previsible, teniendo en cuenta lo que está viviendo el sector de la automoción”, ha apuntado la vicepresidenta y consejera de Economía, Mar Vaquero.
De hecho, en el Ejecutivo aragonés inciden en la situación global que está viviendo la automoción, en medio de una transición hacia el vehículo eléctrico que no termina de arrancar. “Todos somos conocedores de que el sector de la automoción está teniendo en estos momentos diferentes situaciones que afectan a la producción y al empleo. En ello estamos pendientes, trabajando y colaborando con todo el sector de la automoción”, ha señalado Vaquero.
Pese a ello, la vicepresidenta se mantiene optimista con la instalación de una gigafábrica de baterías en Figueruelas, para la que ha recibido casi 200 millones de euros de ayudas públicas. “Es obvio que en estos momentos sería difícil de entender para hoy mismo, pero las empresas trabajan con previsión y el sector del automóvil tiene su proyección temporal y ahí creemos que tendrá que entrar esta gigafactoría”, ha añadido.
Según la información de ‘La Tribuna de la Automoción’, Stellantis pasaría el Peugeot 208, actualmente en la línea 1, a la 2, en la que ya se ensamblan el Opel Corsa y el Lancia Ypsilon, como mínimo hasta 2027. Las previsiones que maneja la compañía pasan por una caída de la producción hasta los 290.000 vehículos en 2025 y 245.000 en 2026, lejos de las 375.000 con las que se acabaría este año.
Mientras, la Dirección y los sindicatos están negociando la aplicación de un ERTE para 4.200 trabajadores desde este 1 de diciembre y durante todo el 2025. La compañía ha aceptado la petición del Comité de garantizar el 80% del salario y las pagas extraordinarias, aunque todavía faltarían por pulir algunos aspectos para cerrar el acuerdo.