El mercado del alquiler continúa tensionándose y ya ha alcanzado niveles históricos en Aragón. El precio por metro cuadrado ya se sitúa en 9,3 euros mensuales de media, disparándose un 8,6% en sólo un año, e incluso superando los 10 euros en Zaragoza. De hecho, hay municipios, sobre todo los turísticos en el Pirineo, donde apenas se encuentran “seis o siete viviendas” para alquilar en plena temporada de invierno y los trabajadores se ven obligados a recurrir a pisos de otros municipios cercanos, con menor impacto del turismo.
Esta es una de las conclusiones del último informe de la Cátedra del Mercado Inmobiliario de la Universidad de Zaragoza, que resalta que los meses de julio, agosto y septiembre fueron “fantásticos”, cerrando el tercer mejor trimestre desde 2008. En concreto, se han superado las 4.200 compraventas, un 14% más que el verano de 2023, y sumando más de 15.500 operaciones en los últimos doce meses.
De hecho, desde la Cátedra ligan la situación del alquiler con este repunte de las ventas. “Si alguien se dirige al alquiler y se encuentra máximos históricos y precios sobrevalorados, la escapatoria que le queda es la compraventa. Tampoco es sencillo, aunque los tipos de interés están bajando”, ha explicado el director, Luis Fabra.
Paralelamente, los precios de la vivienda también siguen creciendo “moderadamente”, en torno al 3,2% con respecto al verano pasado hasta los 1.561 euros/metro cuadrado y una media de 136.000 euros. Sin embargo, el principal “sensor” del mercado, que es la vivienda usada, ha tenido un crecimiento más intenso en sólo un año, del 7,1%, y en Zaragoza capital ya roza los 2.000 euros/metro.
“En todos los casos se observa un cierto repunte de la actividad y una reactivación del precio. Estaba cerca del 0% durante los últimos 4 o 5 trimestres en toda la geografía española. Afortunadamente, estamos en tasas bajas, pero se va notando los nueve años consecutivos de subidas de precios. Aún estamos por debajo de niveles históricos de 2006 y 2007”, ha apuntado Fabra.
En obra nueva, las ventas han crecido un 7,7% con una “demanda constante”, que avanza que 2024 pueda ser el segundo mejor año desde el estallido de la burbuja inmobiliaria. No obstante, hay datos que preocupan, como la falta de stock, que podría corregirse en unos años si se mantuviera una estabilización en los costes. “Se han vendido más de las que se han visado. Si se mantiene la oferta, no tendremos suficientes. Aunque suelen decir que no paran de ver grúas en la ciudad, el 70% ya está vendido”, ha afirmado el director general de Grupo Plaza 14, Fernando Montón.
Con ello, los expertos esperan cerrar el 2024 por encima del 2023 y que esta tendencia tenga continuidad en los primeros meses del próximo año. Sin embargo, temen que la escalada de precios pueda dejar a gente fuera del acceso a la vivienda. “Si se mantienen los datos en crecimiento de habitantes y creación de hogares, hay continuidad en los tipos de interés y buena evolución de salarios, es decir, las condiciones de la actualidad, nada nos hace pensar que vaya a cambiar la situación y no tengamos un buen comienzo de 2025”, ha avanzado el director de la cátedra.