¿De dónde saldrán los 755.000 metros cúbicos de agua que Amazon usará en sus centros de datos en Aragón?

El consumo de agua es una de las preocupaciones de la nueva industria tecnológica, ya que requiere de una importante cantidad de recursos para la refrigeración de los centros de datos. Este es, de hecho, una de las claves por la que las grandes multinacionales están eligiendo Aragón para ubicar sus instalaciones, con hasta 12 centros ya confirmados públicamente, 3 de ellos, de Amazon Web Services, ya en funcionamiento.

El gigante estadounidense se encuentra en pleno proceso administrativo de la gran ampliación de sus centros de datos, con una inversión de 15.700 millones que multiplicará por diez su presencia en la Comunidad. En estos, el consumo de agua, que, en global, se eleva hasta los 755.000 metros cúbicos al año, principalmente para la refrigeración de los equipos, si bien desde la multinacional inciden en que debe hablarse de “uso”, ya que gran parte del agua se devuelve a la red.

En comparación, toda la agricultura aragonesa empleaba 2.072 millones de metros cúbicos en 2018, último año del que se tienen referencias, y Stellantis consumió 949.000 metros cúbicos en su planta de Figueruelas en 2023, según su memoria ambiental presentada en mayo. Desde Amazon remarcan su objetivo de “reponer más agua de la que consumimos” en 2030 a nivel mundial, cifrando en el 41% el “camino recorrido” en 2023.

E. E.

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En este sentido, destacan su colaboración en dos proyectos hídricos con socios locales, detectando y reduciendo la pérdida de agua en fugas y aumentando el flujo de agua reutilizada para las granjas mediante el uso de la tecnología en la nube de Amazon Web Services. “Sabemos que el agua es un recurso valioso y estamos comprometidos a ser positivos en materia de agua. Devolveremos más agua a las comunidades y al medio ambiente de la que utilizamos en nuestras operaciones de centros de datos”, reseñan.

Villanueva de Gállego

En concreto, cada una de las cuatro ubicaciones recogerá el agua de diversos puntos. En Villanueva de Gállego, donde se construirán dos nuevos edificios de 13 y 84 hectáreas, a ambos lados del actual, se requerirán 277.850 metros cúbicos/año.

Este agua procederá, en primer lugar, de cuatro pozos, uno ya existente y otros tres que se construirán para garantizar el suministro, aunque dos de estos se reservarán en caso de fallo del bombeo de los principales. Además, se propone la puesta en funcionamiento de nuevas conducciones hasta un embalse, la adecuación de un depósito ya existente para almacenar el agua y una nueva tubería de 5,5 kilómetros de longitud hasta las instalaciones del centro de datos.

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Igualmente, también se recogerá agua potable procedente de la red municipal de Villanueva de Gállego, que se utilizará tanto para consumo humano como para refrigeración. Para ello, será necesario un nuevo depósito ya en construcción de 2.400 metros cúbicos de capacidad, así como bombeo y tramos de tubería. Este nuevo depósito se está levantando en las inmediaciones del ya existente a cargo del Gobierno de Aragón, en un antiguo aparcamiento, con un coste de 1,4 millones de euros.

Además, se almacenará agua de lluvia en los reservorios de agua que se construirán en el centro de datos, y que, antes de su uso en el sistema de refrigeración, recibirá un pretratamiento.

Huesca

Mientras, el nuevo ‘data center’ que se instalará en Huesca, en 57 hectáreas en el parque tecnológico Walqa, a 700 metros del que está en funcionamiento en Plhus, usará 152.890 metros cúbicos al año cuando esté a pleno rendimiento. Se recogerá agua no potable procedentes de tres nuevos pozos dentro de la parcela del centro de datos, así como la lluvia acumulada en los reservorios que se construirán en las instalaciones.

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Amazon también propone utilizar agua potable de la red municipal de aguas, lo que requerirá mejoras en la infraestructura del abastecimiento del embalse de Valdabra y prolongar la red de abastecimiento existente hasta el centro de datos. En concreto, se ampliará la estación de bombeo de agua bruta de Valdabra y la potabilizadora, y se construirán dos nuevas tuberías, una de nueve kilómetros de impulsión hasta las balsas existentes del CEI, y otra de 1,4 kilómetros hasta el centro de datos.

Una vez tratada, el agua industrial se distribuirá a través de una red de tuberías a los edificios de Walqa y a los tanques de almacenamiento, que han sido instalados para garantizar la continuidad del funcionamiento en caso de fallo o interrupción del suministro de agua. De esta manera, se ampliará la capacidad de almacenamiento de agua del emplazamiento y se podrán repartir los picos de ola de calor entre varios días.

El Burgo de Ebro

Por su parte, el centro de datos que se ubicará en El Burgo de Ebro, de 44 hectáreas junto al que está funcionando, utilizará casi 115.000 metros cúbicos/año. En este caso, Amazon Web Services ya tiene un acuerdo con el Canal Imperial por el cual se suministran un caudal punta de 30 l/s y un volumen anual de 260.000 metros cúbicos para el centro de datos. No obstante, está sujeto a la disponibilidad de agua en los depósitos de agua bruta, teniendo en cuenta que Saica e ICT son usuarios preferentes.

Como refuerzo, se propone abastecer a una de las balsas existentes del Canal Imperial que actualmente carece de suministro directo. Este abastecimiento permitirá, en el futuro, suministrar agua a una nueva balsa adyacente, reforzando así la capacidad de almacenamiento. Se construiría una toma desde el Canal hasta la balsa a través de una tubería de 200 metros. Con ello, Amazon pasaría a ser usuario preferente en el suministro.

Igualmente, se llevará agua potable procedente de la red municipal de El Burgo de Ebro, para lo que se necesitaría una nueva tubería de 6,5 kilómetros. También se acumulará agua de lluvia y se construirán dos nuevos pozos dentro de la parcela del centro de datos, uno para uso común y otro como bombeo de reserva.

Zaragoza

En el centro de datos más grande, el que se ubicará en el polígono Empresarium de Zaragoza y estará vinculado al de El Burgo de Ebro, se usarán 210.000 metros cúbicos al año. Para esta instalación, se recogerá agua del Canal Imperial, para lo que se requiere una nueva conexión, dos nuevas balsas de 200.000 metros cúbicos en total, una nueva estación de bombeo y una nueva tubería de impulsión.

Además, también utilizará agua del río Ebro, aprovechando la infraestructura de riego existente en el polígono Empresarium. Este emplazamiento ya tenía con el anterior propietario una concesión de aguas del río Ebro por parte de la CHE para un volumen anual de riego de 1.512.500 metros cúbicos y un caudal máximo de 154 litros/segundo. Parte del caudal de esta concesión será ahora destinado a los centros de datos. Según cálculos preliminares, el volumen disponible será de 538.435 m3/año y 54,82 l/s.

Del mismo modo, usará agua potable procedente de la red municipal de Zaragoza, fijando una aportación de 1.000 metros cúbicos/día. La impulsión se realizará a través de un ramal de 4,6 kilómetros para el abastecimiento de agua potable y otro a los reservorios de agua.