María González
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La Guardia Civil de Cariñena ha investigado dos menores de edad por los daños ocasionados al muro perimetral de un instituto de educación secundaria de Cariñena. Además de los perpetrados en numerosas tumbas del cementerio de la misma localidad.

El pasado viernes, sobre las 16.00, el Alcalde de Cariñena comunicó a la Guardia Civil de dicha población que varias lápidas del cementerio se encontraban con numerosos daños. Hechos que fueron descubiertos por operarios de una funeraria ese mismo día.

Por tal motivo efectivos de seguridad ciudadana de la población se trasladaron al cementerio para realizar una inspección de lugar y observaron cómo 16 lápidas habían sido fracturadas. También se observaron daños en objetos de ornamentación, tales como cristales, floreros y jarrones. Gran parte de los daños ocasionados se habían llevado a cabo en la zona del Memorial a los fallecidos de la Guerra Civil.

Destrozos en el muro perimetral del instituto de Cariñena. Guardia Civil

Ante estos actos vandálicos y la sospecha de que pudiesen efectuarse otros hechos similares, la Guardia Civil estableció un dispositivo de vigilancia por la zona ese mismo día. A las 21.55 se recibió un aviso de colaboración ciudadana en la central de emergencias, comunicando que varios jóvenes estaban golpeando el muro perimetral de un instituto de educación secundaria de Cariñena y que, a consecuencia de los golpes, parte del mismo se había derrumbado.

De inmediato se trasladaron los agentes al centro educativo y, tras observar los daños del muro que habían provocado la caída de unos seis metros del mismo, realizaron una inspección de los alrededores. Media hora después de recibir el aviso y en una calle próxima al instituto, la Guardia Civil localizó a tres jóvenes que, al percatarse de la presencia de los agentes trataron de salir corriendo, pero fueron interceptados.

Se trataba de tres menores de edad a los que en el momento de su identificación se localizaron evidencias que implicaban su autoría en los hechos. Durante la entrevista con estos jóvenes para indicarles que se iba a dar aviso a sus tutores legales, éstos mostraron gran nerviosismo, reconociendo finalmente que estaban implicados en estos hechos.

Una vez en dependencias oficiales, en presencia de los tutores legales y expuestas las evidencias halladas, los menores reconocieron su autoría tanto en los daños del instituto como en los del cementerio.

Por todo ello se procedió a la investigación de dos de ellos, de 14 y 15 años, ya que el tercero era inimputable penalmente al tener 13 años. Se les imputó supuesto delito de daños por el muro del instituto, delito continuado de daños en el cementerio y otro supuesto delito contra la libertad de conciencia, sentimientos religiosos y respeto a los difuntos.

Las diligencias han sido remitidas a la Fiscalía de Menores y los investigados en custodia de sus progenitores.