Nos despedimos del verano y recibimos el otoño y sus colores. El pirineo aragonés comienza a transformarse y el verde se tiñe de naranja, marrón y amarillo.
Las escapadas y las rutas durante estos meses, antes del invierno son encantadoras por la temperatura y la belleza de la naturaleza que desprende cierto encanto nostálgico.
En Aragón contamos con una riqueza natural espectacular, y con unos pueblos preciosos que ofrecen a todos los visitantes una experiencia renovadora. Naturaleza, historia, gastronomía... Una visita a cualquiera de los pueblos de la comunidad siempre es un buen plan.
La provincia turolense, es la que acoge más pueblos de la lista de 'Los Pueblos más bonitos de España'; sin embargo, en Huesca también encontramos localidades muy interesantes. Una de ellas es Bielsa.
Situado a las puertas del valle de Pineta, este típico pueblo pirenaico ha sabido conservar sus tradiciones más singulares. Entre ellas destacan, sin duda, sus carnavales, los más famosos de Aragón y uno de los más antiguos de España.
Bielsa
Este encantador pueblo pirenaico, está ubicado en el Valle de Pineta, en la comarca del Sobrarbe; combina historia, naturaleza y cultura, ofreciendo a sus visitantes una auténtica experiencia de desconexión y paz.
El casco antiguo de Bielsa es un testimonio vivo de la historia de la región. Pasear por sus calles empedradas, flanqueadas por casas de piedra con tejados de pizarra, es como viajar al pasado. No se puede dejar de visitar la Iglesia de la Asunción, que data del siglo XVI, y el Museo Etnológico, que muestra la rica herencia cultural.
En su plaza Mayor destaca el ayuntamiento, un hermoso edificio renacentista del siglo XVI. Su interior alberga el museo de la localidad, que ofrece un interesante recorrido por la historia y la cultura del territorio. Incluye una zona dedicada a la Bolsa de Bielsa, uno de los episodios de la guerra civil española que supuso el éxodo de la población a Francia.
El entorno natural de Bielsa es uno de sus mayores atractivos. Desde el pueblo, se puede acceder al Valle de Pineta, un impresionante paraje que forma parte del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Aquí, los visitantes pueden disfrutar de rutas de senderismo aptas para todos los niveles, desde paseos tranquilos hasta excursiones más exigentes que llevan a miradores con vistas espectaculares, cascadas y lagos de montaña.
Si se decide ir de excursión a Bielsa, es importante mirar el recorrido antes de salir. Desde Zaragoza son 2 horas y media, y hay que coger la A-23, hasta Sabiñánigo, donde se toma el desvío. Una vez que se llega a Ainsa, en las indicaciones ya aparece Bielsa.
Por otro lado, también es importante tener en cuenta el tiempo. En los meses otoñales los cielos son más inestables y puede sorprendernos fuertes lluvias o incluso alguna tormenta. Ai que para que nuestra salida sea perfecta, hay que prepararla e ir bien equipados.