La cocina italiana es una de las favoritas de gran parte de la población mundial. La pizza o los helados tienen numerosos fans, pero también los tiene la pasta. La boloñesa, amatriciana, al pesto… Sin embargo, hay una que se coloca entre las más demandadas, la pasta carbonara.
Pero, una carbonara original, auténtica. Porque si hay algo que molesta, y mucho, a los italianos, es que en España se llame carbonara a la salsa hecha con nata y bacon. La verdadera carbonara no tiene mucho que ver con esa, y también lleva más tiempo de preparación.
La carbonara se originó en el Lacio, concretamente en Roma, y su nombre viene de 'carbone', carbón en español. Además, la forma más común de comerla es con spaghettis, aunque se pueden encontrar con otros tipos de pasta como 'pennes', 'tagliatelle' o 'rigatoni'.
Receta carbonara
Lo primero que se necesita es un paquete de pasta, el tipo, varía según los gustos. Después, no pueden faltar el queso pecorino, los huevos, el guanciale (que no bacon ni panceta) y la pimienta negra recién molida.
Hay que tener en cuenta que productos como el guanciale no se encuentran en cualquier supermercado, o que la calidad no será la mejor en todos ellos.
Una vez se tienen todos los ingredientes, basta con hervir normal y corriente la pasta, cocinar el guanciale sin aceite (ya desprende por sí mismo) e integrarlo todo en una sartén.
Por otro lado, se hace la mezcla de la salsa. Se separan las yemas del huevo (unas dos por persona) y se mezclan con el queso pecorino rallado hasta que queda una mezcla homogénea y cremosa. Ahí se añade la pimienta al gusto. En este punto es posible añadir un poco del agua de cocción para darle más o menos espesor.
Por último, hay que llevarla al plato y comenzar a degustarla.
La mejor de Zaragoza
Es difícil igualar esas deliciosas carbonaras que se cocinan en Italia, en lugares como la Osteria da Fortunata (Milán y Roma), uno de los locales más famosos del país transalpino. Sin embargo, los restaurantes italianos existen por todo el globo tratando de imitar esos platos típicos, o con cocineros italianos de nacimiento que exportan sus recetas a otras partes. Gracias a ellos, no es necesario preparar una casera para poder disfrutar de ella.
Así pues, viajar a Roma y comerse una carbonara real y sabrosa es posible sin coger un avión. En Zaragoza, el restaurante Gonzo Bitter Bar es uno de los mejores locales para ello.
Gonzo Bitter Bar se encuentra en pleno centro de la capital, en la plaza de los Sitios y su plato Spaguetti alla Carbonara arrasa en Zaragoza. "Elaborada como en Roma, SIN NATA, solo con 4 ingredientes: huevo, queso pecorino, pimienta negra y guanciale" es la descripción clara y concisa que hace el restaurante de estos. Su precio es de 18 euros.
"En Gonzo Bitter Bar hemos seleccionado nuestras pastas de los mejores pastificios de Campania, la región que, desde hace más de quinientos años, elabora la pasta de grano duro que alimenta a Italia", describe el local en el inicio de su carta.
Más allá de la carbonara, tienen muchas otras opciones italianas como pizzas, antipasti o postres. También una gran selección de cócteles.
No obstante, en Zaragoza, como en el resto del país, existen muchas alternativas de italianos. Otros de los más destacados en la ciudad por su auténtica carbonara son Il Principale o La Parthénope.