Aragón cuenta con una renta media por persona y anual que ronda los 18.152 euros, según datos del Instituto Aragonés de Estadística. Una renta media que por supuesto varía en sus diferentes provincias, situándose Zaragoza en una renta media anual de 17.965 euros.
Una media con la que Huesca se sitúa en 17.178 y que en Teruel es de unos 15.571 euros. Sin embargo, si ahondamos un poco más en estas cifras para apreciar la diferencia entre unas localidades y otras, puede apreciarse la gran diferencia que existe en algunos municipios.
Este es el caso de algunos como Longares que ni siquiera llegan a los 10.000 euros en de renta media anual por persona en Zaragoza según datos del INE. Cifras que contrastan con aquellos pueblos que sí cuentan con cifras más altas como es el caso de Mozota (con 18.233) o Jaulín (con 15.934), cuyas poblaciones viven en su mayoría dedicadas al sector servicios.
Pero si queremos hablar de la renta más baja de toda la provincia de Zaragoza según los datos del atlas de distribución de la renta de los hogares publicado por el INE. Puede apreciarse que el pueblo con los ingresos per cápita más bajos de la provincia de Zaragoza lo encontramos en Alarba, donde la renta neta por habitante ni siquiera llega a los 9.672 euros.
Se trata en este caso, de una población de apenas 133 habitantes, ubicada a las faldas de la Sierra de Pardos. Un bonito municipio en el que aproximadamente el 69,8% de la población vive dedicada a la agricultura, manteniendo explotaciones en su mayoría relacionadas con los cereales, frutales y viñas. El resto de trabajadores se dedica a los servicios (un 21%), un 5,5% a la construcción y un 3,7% a la industria. Una población que destaca por estar rodeada de viñedos y almendros y que además, es parte del Camino del Cid. Uno de esos rincones de Zaragoza que en definitiva, merece la pena conocer.
Qué ver y hacer en Zaragoza
En la comarca de Calatayud, a los pies de la Sierra de Pardos, se encuentra el encantador pueblo de Alarba, rodeado de viñedos, almendros y suaves colinas. Con raíces musulmanas, su nombre en árabe significa "miércoles", y su historia se refleja en las construcciones tradicionales de tapial y adobe, típicas de aquella época.
Entre su patrimonio más destacado encontramos la Iglesia Parroquial de San Andrés, un templo gótico tardío del siglo XVI, que alberga un impresionante relieve sepulcral de 1594 y que merece la pena visitar.
No puedes dejar de visitar también la Ermita de la Virgen del Castillo, que además de su valor histórico, acoge un museo y una sala de exposiciones. Alarba también presume de una fuente renacentista del siglo XVI, aún en funcionamiento, que forma parte de un antiguo sistema hidráulico con abrevadero y lavadero.
Este pequeño pueblo es una parada imprescindible en la Ruta Turístico-Cultural del Camino del Cid, que sigue los pasos del legendario caballero en su exilio desde Burgos hasta Valencia, añadiendo un toque de historia y leyenda a sus encantadores paisajes.
En otoño e invierno, el pueblo se vuelve especialmente tranquilo, como tantos otros rincones de nuestra geografía, sin ruidos ni prisas. Es el lugar perfecto para desconectar del estrés de la ciudad o simplemente relajarte y disfrutar del descanso.