Una mujer haciéndose una mamografía.
Cómo prevenir el cáncer de mama: ejercicio, buena alimentación y detección precoz
El 19 de octubre se celebra el Día Mundial contra el Cáncer de Mama, una fecha clave para recordar la importancia de la prevención y la detección precoz.
El 19 de octubre, Día Mundial contra el Cáncer de Mama, es una fecha clave para concienciar sobre la importancia de la prevención y la detección precoz de esta enfermedad.
Este domingo día 20 de octubre la capital aragonesa se vestirá de gala, principalmente de rosa, para unirse por una causa benéfica, por todas las mujeres que luchan día a día contra el cáncer de mama, en Zaragoza se celebrará la carrera de la Mujer.
En esta edición participan 14.000 mujeres, 1.000 más que el año pasado. Lo más importante es la recaudación, la Asociación Española Contra el Cáncer recibirá una donación de 80.000.
Quirónsalud Zaragoza destaca cómo el ejercicio físico y las revisiones periódicas pueden reducir el riesgo de desarrollar este tipo de cáncer, que en 2023 afectó a más de 35.000 mujeres en España.
El papel del ejercicio físico en la prevención
La doctora Elena Aguirre, directora del Instituto Oncológico de Quirónsalud Zaragoza, subraya que la actividad física regular disminuye hasta en un 25% el riesgo de padecer cáncer de mama. Según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), es ideal realizar 150 minutos de ejercicio cardiovascular semanal (como caminar o nadar) combinados con dos sesiones de fuerza.
El ejercicio no solo previene el cáncer, sino que mejora la calidad de vida de las pacientes durante el tratamiento, ayudando a combatir la astenia, una fatiga extrema que afecta a muchas mujeres que reciben tratamiento oncológico.
El cáncer de mama es el tumor más frecuente entre las mujeres, y su detección en etapas tempranas aumenta significativamente las probabilidades de curación. La detección precoz no solo permite tratamientos menos invasivos, sino que también incrementa las tasas de supervivencia.
En Quirónsalud Zaragoza, un equipo multidisciplinar trabaja de manera coordinada para asegurar que cada paciente reciba una atención integral y personalizada. La doctora Aguirre recalca la importancia de las revisiones periódicas, especialmente en mujeres mayores de 40 años o con antecedentes familiares de cáncer de mama.
Nutrición y otros factores preventivos
Junto al ejercicio, la doctora Aguirre aconseja seguir una dieta mediterránea, rica en frutas, verduras y grasas saludables. Limitar las grasas saturadas y evitar el alcohol es esencial para reducir los factores de riesgo.
A pesar de que algunos factores, como la edad o los antecedentes familiares, no se pueden controlar, llevar un estilo de vida saludable sigue siendo una herramienta poderosa en la lucha contra el cáncer de mama.
El deporte también es beneficioso para aquellas pacientes que han sido diagnosticadas. Durante y después del tratamiento, la actividad física ayuda a reducir el riesgo de recaída y mejora tanto el bienestar físico como emocional.
Volver a practicar deporte lo antes posible es altamente recomendable, siempre bajo supervisión médica. Además de reducir el riesgo de recurrencia, el ejercicio promueve una mejor recuperación postquirúrgica y reduce los efectos secundarios de los tratamientos.
