Este pueblo de Aragón tiene una muralla más larga que la de Ávila: sus torres y castillo te trasladan a la Edad Media
Se trata de una de las localidades más bellas de Aragón: fue fundada por los musulmanes y está llena de historia.
Más información: El curioso pueblo de Aragón con el nombre más largo de España: un topónimo que tiene seis palabras y 28 letras
Sin embargo, en tu lista de pueblos con gran belleza que tienes que visitar en Aragón no puede faltar Daroca (Zaragoza), conocida como "la ciudad de los siete sietes", destaca porque tiene una de las murallas medievales más largas de Aragón.
Cabe destacar que Daroca está bien conectada por carretera, de hecho, está a unos 90 kilómetros de Zaragoza. Puedes llegar fácilmente en coche, lo que te permitirá explorar a fondo sus alrededores, o tomar un tren desde Zaragoza.
Tiene un gran valor coomo pueblo a visitar en tanto que es uno de esos pueblos de Aragón que tiene una rica historia y un impresionante patrimonio medieval. De hecho, esta pequeña localidad tiene mucho que ofrecer a quienes desean retroceder en el tiempo y explorar la Edad Media.
Daroca fue en su época una ciudad de gran importancia estratégica, debido a su ubicación en un cruce de caminos y cerca del río Jiloca. Fue una plaza fortificada clave durante la Edad Media, y su situación entre el Reino de Aragón y el Reino de Castilla le dio un papel destacado en varias batallas y conflictos. Además, su impresionante muralla y varios castillos muestran su relevancia como ciudad fortificada.
A lo largo de su historia, Daroca pasó por diversas manos: musulmanes, cristianos y, finalmente, fue uno de los puntos de resistencia durante las guerras medievales. Esta mezcla de culturas y épocas ha dejado huella en la arquitectura y en las leyendas que siguen vivas en el pueblo.
En consecuencia, en lo que tiene que ver a las primeras documentaciones de esta localidad, la primera referencia escrita de la ciudad se encuentra en un documento del año 837, donde se menciona como una localidad significativa en el norte de al-Ándalus. En ese periodo, la familia de los Banu al-Muhayir, originaria de la tribu de los tuyibíes o árabes del sur, procedentes del Yemen, se había asentado allí. Los árabes le dieron el nombre de Calat-Darawca en el año 862, y lo mantuvieron durante los siguientes 400 años.
¿Qué se puede ver en Daroca? La muralla es uno de sus principales atractivos. Se conserva en un estado impresionante y rodea gran parte del casco antiguo del pueblo. Aunque el pueblo fue ampliado fuera de las murallas, el perímetro original de la ciudad fortificada es aún visible y cuenta con varios torreones, puertas de acceso y un sistema defensivo que refleja la importancia de la ciudad en su época.
Otro de los puntos de interés es la Basílica de Santa María de los Sagrados Corporales, que fue declarada basílica menor en 1890, data de los siglos XII a XVI. Originalmente construida en estilo románico, fue modificada y ampliada en los siglos siguientes debido a su creciente relevancia como custodia de la reliquia de los Sagrados Corporales.
También las diferentes iglesias que existen en la localidad merecen una visita: la iglesia de San Miguel Arcángel (siglos XII-XIII), la iglesia de Santo Domingo de Silos (siglos XII-XIII) y la iglesia de San Juan Bautista (siglos XII-XIII).
Otro punto de interés es la fuente de los veinte caños, construida en 1639, es uno de los pocos ejemplos de fuentes monumentales que se conservan en Aragón. Además, es uno de los casos más representativos en los que se puede observar claramente cómo este elemento urbano contribuye a la creación y transformación del espacio.
Además, las casas de piedra, las portadas de madera y los detalles arquitectónicos tradicionales le dan un encanto especial que refleja su pasado medieval. Y tampoco podemos olvidar que Daroca está rodeada de un paisaje montañoso, ideal para los amantes de la naturaleza. Hay varias rutas de senderismo que permiten explorar la belleza del entorno natural mientras disfrutas de la arquitectura medieval del pueblo.
No te olvides de probar la gastronomía local: Daroca ofrece platos tradicionales de la región, como el ternasco de Aragón, las migas o el cordero asado, que son ideales para completar tu experiencia medieval.