Mis primeras mil portadas de El Español

Primera portada de El Español

Primera portada de El Español

Siempre tuve la neura de coleccionar portadas de periódicos, obsesión que nunca pude llevar a cabo porque siempre me despistaba o llegaba tarde a la edición número uno de cualquier diario de tirada nacional, primero en papel y posteriormente en formato digital.



Con el diario El Español me dije que esta ocasión era la mía. Seguí a esta criatura de Pedro J. Ramírez desde el principio, desde aquel blog del arponero que tuvo que hacerse a la fuerza armador. Adivinaba en él que venía a contar lo que algunos quieren dejar guardado en algún cajón o relatar a favor de viento, me cautivaba ese grito de guerra de “Hagámoslo juntos”. Parecía como si alguien estuviera dispuesto a gritar en la tumba del maestro Mariano José de Larra “Levántate y anda” y eso no me lo podía perder.



Hoy, miércoles 4 de julio de 2018, he archivado la portada número 1.000 de El Español. Mi colección se ha hecho realidad después de caminar mil días juntos. Las tengo todas, numeraditas, ordenaditas, con su fecha de edición en el nombre del archivo, como haría cualquier chiflado y maniático de los que tienen a bien llamarse coleccionista, pero… ¡coleccionista de los de verdad!



Durante el camino que he hecho al andar estos mil días, he ritualizado tantos desayunos leyendo El Español que ya tomar café no me sabe a nada si no deslizo el dedo por la pantalla del móvil o de la tablet para leer un artículo. Así mismo, que rara me resulta la cama por la noche si no le hecho la última miradita al diario.



Voy a intentar caminar con El Español otros mil días, de momento, y a disfrutar de esos arponazos ante el avistamiento de cualquier cachalote en el mar del panorama nacional.