Opinión

Los Pitufos Toreros

  1. Opinión

Uno de las series de televisión más divertidas es Los Pitufos. Éste fue el nombre de unos personajes del dibujante belga Peyo, dentro de su serie Johan y Pirluit, para el semanario Le Journal de Spirou. Los lectores más noveles quizá se sorprendan al conocer la fecha de su publicación: 1958. El dibujante falleció en 1992, continuando su obra su hijo Thierry. Sus nombres, a la par que tiernos, revelaban grandes dosis de humor: Pitufo Dormilón, Genio, Enamorado, Granjero, Pintor, Poeta, Goloso… Papá Pitufo y Pitufina, siendo ésta la única fémina de toda la historieta. Estos personajes, Pitufos, son fuente de inspiración y, por qué no, conspiración en la actualidad española.

Los chicos y chicas de Podemos -no soy yo de diversificar sus sexos naturales- llevan un tiempo tirándose los mensajes a la pantalla: dada su edad, preparación, nivel intelectual y, sobre todo, porque la conexión a internet, así como los dispositivos personales de diputados / senadores son proporcionados por ambas Cámaras -con tu financiación y la mía-, se realizan a través de las redes sociales. La culpa es nuestra… y de la Constitución Española de 1978: los periodos de sesiones son de septiembre a diciembre y febrero a junio. Recordemos el refranero tradicional:

-Cuando el Diablo se aburre, mata moscas con el rabo.

Convendrán conmigo al establecer el exceso de ocio. Desde diciembre hemos visto de todo, incluso a uno de ellos, Pitufo Coleta, hablando a un leño, casi como si su compañero, Pitufo Imberbe, fuera ese trozo de madera. La propia Universidad Complutense de Madrid, hogar de muchos de ellos, tiene una afamada Clínica de Investigación Psicológica. ¿Tendrían algo que decir sobre esto, dado que, a espaldas de Pitufo Coleta, había una hermosa lumbre donde prendían trozos de madera?

El debate está muy abierto. Un par de veces por mañana, tarde y noche, nos lanzan sus mensajes a nosotros para que sean leídos por su compañero, amigo, hermano… dado el nivel, ¡qué daríamos por haber visto su Cena de Navidad!

Su ideología está bastante difusa: son comunistas, anticapitalistas, separatistas… pero, oiga, que todos están apesebrados con nuestros impuestos. Llegan a vanagloriarse de cobrar sólo el triple del salario mínimo interprofesional. Quizá, en lugar de la primera persona del plural de verbo poder, presente indicativo, debieran de utilizar el verbo caber: ahí cabemos... ellos todos, no nosotros.

Su lucha está tan abierta, además de encarnizada, que alguna compañera ha decidido retirarse de la contienda. Esa posición es la más inteligente: esperará a ver el macho victorioso para sumarse a la fiesta. ¿Habrá derrota? Viniendo de la ideología comunista, ésa donde otro te hace tu autocrítica, si alguno de ellos no está acostumbrado, recomendaría mirar bien el asiento antes de reposar en una silla, no sea que haya chincheta o guindilla apuntando hacia el final de la espalda. Los primeros avances de retoque fotográfico datan de la época de Stalin. En aquellos tiempos, cuando alguien caía en desgracia -y tan grande era el desplome, que no se volvía a tener noticia-, borraban su imagen de las fotografías… incluida su sombra.

Nuestros deliciosos Pitufos tendrán su reunión, concentración, asamblea, congreso,… en la plaza de Toros Vistalegre. En España somos así de contradictorios. ¿Que se es contrario a los toros? Pues allí celebrarán, por segunda vez, el evento. El recinto está cubierto por una cúpula; ha servido para conciertos de música, celebraciones de Nochevieja, partidos de baloncesto y, festejos taurinos. Me pregunto ¿qué múltiple sentido darán estos muchachos al coso?

Me gusta el espectáculo y respeto a quien no, ya que es un principio democrático. Conociendo las partes de la lidia, así como la estructura de una plaza de toros… comenzará el paseíllo, omitirán el saludo al presidente -es un síntoma de poder y el poder es del pueblo-, tocarán clarines y timbales -esas agrupaciones de batucadas, muy populares en esa agrupación electoral-, y se abrirá la puerta de los sustos. ¿Quién saldrá por ella? Nadie, porque los principales Pitufos quedarán expuestos a la concurrencia para exponer sus opciones. Las cuadrillas, otros pitufos menores, se dedicarán con nuestros móviles a enviarse mensajes. Tocarán, lidiarán, votarán las propuestas y a los listos -los torpes siempre pierden- todos aplaudirán.

En ese momento, los monosabios -son los encargados de retocar el albero (tierra) del ruedo- saldrán a recomponer la amalgama de restos de la Pitufada. La cantidad de daños entre ellos será tremenda; si cumplen su palabra, aquellos derrotados saldrán de los principales puestos. Se hace difícil, casi increíble, adivinar cómo cambiarán las tarjetas y los dispositivos celulares, los grupos de mensajes…

-Los Pitufos parecen estar locos… - diría Asterix.